LIQUI MOLY desarrolló el lubricante 2T Motor Oil Race Tec para ofrecer el máximo rendimiento en motores de dos tiempos que utilizan que los karting.
En comparación con los aceites de motor para coches, los lubricantes para los karts suponen un nicho de mercado. No es un mercado en el que se gane mucho dinero. “Pero no se trata de eso”, afirma Oliver Kuhn, subdirector de Lubricantes en LIQUI MOLY. “Aquí podemos poner de manifiesto nuestra competencia tecnológica”.
A las altas revoluciones de los motores de carreras, los aceites para motores de dos tiempos convencionales llegan rápidamente a sus límites de rendimiento. Una lubricación insuficiente puede acabar con el motor y, en cualquier caso, deja escapar segundos valiosos a causa del aumento de la fricción.
El 2T Motor Oil Race Tec se ha desarrollado especialmente para el rendimiento en carreras. Una mezcla de aditivos especial le confiere su gran potencia para que el kart pueda trasmitir toda la potencia del motor al asfalto, incluso a carga máxima. La Federación Internacional del Automóvil (FIA) ha concedido al aceite su autorización oficial.
El ámbito de aplicación del 2T Motor Oil Race Tec va más allá del deporte del karting. “Al fin y al cabo, este lubricante es para todos los motores de dos tiempos que deben soportar cargas extremas, es decir, también los scooters y las motos”, afirmó el especialista.
El aceite se basa en ésteres y puede utilizarse con todo tipo de combustibles, excepto el metanol. Se quema sin dejar apenas residuos. Esto mantiene la cámara de combustión y los pistones libres de sedimentos y suciedad. Un aspecto importante, ya que de lo contrario aumentaría la fricción y, por lo tanto, se resentiría el rendimiento. “Queremos que los conductores puedan desplegar todo su potencial y que no se vean frustados por un aceite inadecuado”, explica Oliver Kuhn.