El Centro de tecnologías avanzadas BRP de la Universidad de Sherbrooke (CTA) recibió 11.3 millones de dólares en respaldo financiero para desarrollar una tecnología de motor híbrido para el descapotable Can-Am Spyder de BRP. Se trata del único proyecto de desarrollo de un biplaza descapotable híbrido eléctrico en el mundo.
Una inyección de 6.2 millones de dólares del programa Automotive Partnership Canada y 5.1 millones de dólares de BRP harán que el proyecta se extienda por un periodo de cuatro años.
“Nuestro mandato es ambicioso y complejo”, explicó Mihai Rasidescu, presidente y director general del
CTA. “Nuestra meta es desarrollar una tecnología para híbridos eléctricos completamente nueva para un vehículo de tres ruedas que utiliza un 50 por cientomenos de combustible y reduce en un 50 por ciento las emisiones de CO(2), a la vez que conserva su velocidad, potencia y rendimiento”.
“Al decidir el establecimiento de centros de I&D, BRP ha confirmado su compromiso para acelerar el desarrollo de nuevas tecnologías más limpias y eficientes”, declaró Jose Boisjoli, presidente y CEO de BRP. “Las tecnologías de sistemas de transmisión utilizadas en nuestras motos para nieve, vehículos “side by side” y motores fuera de borda ya son las mejores de la industria en términos de consumo de combustible, y constituyen hitos en dirección a nuestra meta de ofrecer a los consumidores una tecnología de desempeño cada vez más ecológico”.
El CTA está en el corazón de la innovación, y la cooperación entre la Universidad de Sherbrooke y BRP es un activo sin paralelo en los proyectos de investigación y desarrollo.
“Sin lugar a dudas este proyecto de investigación aplicada producirá una nueva generación de ingenieros”, comentó la rectora Luce Samoisette, Universidad de Sherbrooke. capacitados, y tendrá un impacto significativo en diversos niveles”.
A través de esta iniciativa, se capacitará en un alto nivel a 20 estudiantes de posgrado.
Más que modificar la tecnología híbrida existente, los investigadores tendrán que diseñar un sistema
de propulsión enteramente nuevo.
“Crear un vehículo de tres ruedas en vez de un coche híbrido plantea importantes desafíos de diseño, que requieren un elevado grado de innovación”, comentó el profesor Desrochers. “Estos desafíos incluyen la falta de espacio para acomodar la motorización híbrida, problemas
de refrigeración, aerodinámica, peso del vehículo y ruido. Todo debe ser estudiado y modificado”.
Durante los cuatro años próximos, el CTA producirá tres generaciones de prototipos y suscomponentes. El producto final deberá aprobar las pruebas en términos de desempeño, confiabilidad, durabilidad y
producción económica en masa. Todas las innovaciones tecnológicas serán potencialmente transferibles a otros tipos de vehículos y productos.