La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz dio a conocer su postura, con referencia a la Norma de Emisiones de Bioxido de Carbono y rendimiento de combustible, la cual exigiría la incorporación de aplicaciones tecnológicas de vehículos automotores nuevos.
En conferencia de prensa, Eduardo Solís, presidente del organismo, explicó que dicha normatividad tiene su fundamento en la norma americana Corporate Average Fuel Economy (CAFE), misma que en el vecino país ofrece incentivos a los consumidores y fabricantes de automóviles.
“En Estados Unidos para la aplicación de este régimen, el gobierno federal otorga siete mil 500 dólares como incentivo al consumidor por vehículo, para la comercialización de nuevas tecnologías como los vehículos eléctricos e híbridos.
De esta manera dijo, la industria automotriz propone una solución integral basada en políticas públicas que promuevan la renovación vehicular, aunque dependerá de cada armadora presentar sus resultados y establecer un “promedio corporativo”.
Puntualizó que para que dicha medida sea exitosa, ésta debe considerar las condiciones de infraestructura del país como orografía, altitud, condiciones viales y calidad de los combustibles.
“El proyecto de norma que se encuentra en la Comisión federal de mejora regulatoria (COFEMER), al no tener todos los elementos de flexibilidad de la norma americana CAFE, promueve el consumo de autos usados en nuestro país”, señaló el directivo.
Finalmente, refrendó el compromiso de los industriales de seguir avanzando en la elaboración de una norma que sea exitosa y promueva la renovación vehicular, capaces de lograr lo