Con la tecnología Run-Flat de Bridgestone, una ponchadura es cosa del pasado, ya que estos nuevos e innovadores avances aseguran la estabilidad del automóvil, permitiendo continuar con el manejo del vehículo aún con la picadura de la llanta o con la pérdida repentina de la presión de aire.
Durante las pruebas se examinaron sus capacidades de frenado y maniobrabilidad en piso seco y superficies mojadas, así como de tracción sobre nieve y hielo, asegurando confort y estabilidad durante el manejo, garantizando el ahorro en el consumo de combustible.
“Los modelos probados de Bridgestone muestran considerables mejoras en comodidad y resistencia a la rodada, particularmente en comparación con generaciones anteriores” mencionaron expertos en la materia.
Los neumáticos Bridgestone RFT tienen características de emergencia que le permiten continuar su desempeño en caso de una ponchadura, por lo que es posible seguir conduciendo con seguridad.
El uso de RFT en las llantas Bridgestone no sólo reduce el peligro de accidentes, si no que ya no es necesario tener un neumático de repuesto a bordo.
Por otra parte, dado que los automóviles nuevos no están equipados con kits de reparación, RFT ofrece a los conductores más tranquilidad y el compromiso por mejorar la seguridad y movilidad para todos los usuarios de carreteras en todo el mundo.
Los neumáticos están elaborados con un refuerzo especial en la pared lateral, es innovador y extremadamente resistente al calor por su tecnología (NanoPro-Tech), esto permite estabilidad.
En la prueba realizada por los clubes de automovilistas, todos los neumáticos de Bridgestone con tecnología Run-Flat, continuaron conduciendo por otros 120 kilómetros después de la completa pérdida de presión de aire, mientras que las llantas convencionales funcionaron apenas tres kilómetros.