Durante el proceso de reestructuración, el Gobierno proveerá suficiente financiamiento para Chrysler como deudor en posesión de los activos (DIP), que permitirá la continuación del “negocio de manera usual”. La compañía, sin menoscabo alguno, honrará las reclamaciones de garantía, pagará a proveedores y mantendrá su red de distribuidores operando para continuar sirviendo a nuestros valiosos clientes.
“Para crear esta nueva compañía, estamos usando este esquema de “reestructuración” en la Corte, para poder implementar rápidamente cambios, difíciles pero necesarios que incluyen: los acuerdos sobre la estructura de salarios y prestaciones para empleados en activo y retirados que es competitivo en comparación con las empresas manufactureras extranjeras en Estados Unidos, una reducción de la deuda y en el pago de intereses; la venta de activos innecesarios; una red de distribuidores racionalizada y más eficiente; y nuevos acuerdos con nuestros proveedores,” dijo Nardelli.
Las operaciones de Chrysler en México, Canadá e Internacional no son parte de esta protección de “reestructura” en la Corte.
Como parte de la reestructura y con el respaldo del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, GMAC será el proveedor preferencial de financiamiento para el negocio de nuestros distribuidores Chrysler y de clientes al menudeo. Podrá ofrecer las mejores opciones en planes de financiamiento a largo plazo para los distribuidores Chrysler y los clientes, con base en plazos y tasas de interés estándar en el mercado.
Al término de la transacción, la Sociedad para el Beneficio Voluntario de Empleados (VEBA), por sus siglas en inglés, poseerá el 55 por ciento de la nueva compañía, los Gobiernos de Estados Unidos y Canadá serán dueños en forma proporcional del 10 por ciento. Inicialmente Fiat tendrá una participación del 20 por ciento en acciones de Chrysler y además tendrá el derecho de aumentar su participación en un 15 por ciento adicional en tres etapas conforme al siguiente criterio: cinco por ciento por proporcionar una plataforma de un vehículo de 40 mpg a Chrysler que será producido en los Estados Unidos; cinco por ciento por facilitar un motor de bajo consumo de gasolina el cual también se producirá en Estados Unidos, para utilizarlo en los vehículos Chrysler; 5% por proveer el acceso a su extensa red de distribución global para facilitar la exportación de los vehículos Chrysler. Fiat no podrá ser dueño mayoritario hasta que todos los préstamos del gobierno de los Estados Unidos hayan sido pagados totalmente.
Como parte de la reestructuración, la mayoría de las operaciones de producción serán temporalmente suspendidas, efectivo el lunes 4 de mayo de 2009. Los planes de producción reanudarán actividades en cuanto termine la transacción, lo cual se anticipa en un periodo de 30 a 60 días.
“Queremos reconocer a la Administración, El Departamento del Tesoro de Estados Unidos, al equipo Presidencial para la Industria Automotriz y al Gobierno Federal de Canadá y al Gobierno de la Provincia de Ontario por su energía y los esfuerzos en impulsar la creación de esta nueva compañía”,“dijo Nardelli .
“También es importante reconocer a Cerberus y a Daimler, que sentaron las bases para esta alianza, así como a muchos otros socios estratégicos de Chrysler, incluyendo al liderazgo del Unión del Sindicato de Trabajadores de Estados Unidos (UAW) y la Unión de Trabajadores de Canadá (CAW), empleados, distribuidores y proveedores. Sin sus invaluables sacrificios, su generosa lealtad y su creencia en Chrysler, esta alianza no hubiera sido posible. Estamos satisfechos por concluir nuestra nueva asociación con Fiat. Pueden estar seguros que habrá muchos cambios mientras avanzamos con la implementación de nuestros planes. Pero hoy, desde todos los puntos empezamos una nueva gran compañía con una deuda mucho menor, finanzas más sólidas, un portafolio de producto más amplio y apoyados por una compañía bien posicionada en términos financieros.