Ford y Lincoln superan las pruebas ambientales más exigentes para ofrecer máxima seguridad y al mismo tiempo cuidar al planeta.
Ford y Lincoln cumplen ha implementado rigurosas pruebas de validación, como las que se realizan en cámaras ambientales. Estas cámaras permiten exponer los vehículos a condiciones extremas de temperatura y humedad, sometiendo componentes tanto exteriores como interiores a ciclos agresivos que simulan desde fríos árticos de -40° hasta calores abrasadores de 150°.
Las cámaras ambientales son herramientas avanzadas que permiten verificar que todos los componentes del vehículo funcionen correctamente bajo condiciones extremas. Partes como las luces, espejos, paneles de puertas y consolas son evaluadas para garantizar su durabilidad y resistencia.
Por ejemplo, se prueban las aperturas y cierres de ciertas partes exteriores en diferentes temperaturas, asegurando que cada detalle del vehículo mantenga su integridad y funcionalidad durante toda su vida útil.
Componentes clave de las SUVs tanto de Ford como de Lincoln como las partes plásticas interiores, la consola central, los paneles de las puertas, gran parte del panel de instrumentos, entre otras, se someten a ciclos de temperatura agresivos.
En el exterior, elementos como las luces delanteras y traseras, los espejos, y otras partes, también son rigurosamente evaluadas. Por ejemplo, el cofre se pone a prueba con un método de múltiples interacciones de apertura y cierre a diferentes tipos de temperaturas. Todo eso para garantizar que cada parte del vehículo mantenga su integridad, y asegurar su fiabilidad y durabilidad durante todo el tiempo de vida del vehículo.
Al hacer estas validaciones, lo primero que se revisa es que haya funcionalidad posterior a la durabilidad. Es decir que la función se mantenga después del ciclo de durabilidad acelerada y al estrés que se les impone a las diferentes partes en las pruebas, para así encontrar puntos de fatiga que puedan generar una falla. El segundo punto que se evalúa es la apariencia. Después de someter la parte a la durabilidad con condiciones extremas de temperatura y de humedad, se hace una evaluación dimensional incluso con escáneres 3D para verificar si hubo cambios a nivel dimensional. Por último, se realizan evaluaciones más técnicas, en donde se evalúan torques, presiones, corrientes, etc.
Estas pruebas forman parte de un esfuerzo más amplio de Ford de México, que contribuye al desarrollo global de productos. Gracias a estos rigurosos procesos, los vehículos que ves rodar en las calles han sido probados y aprobados bajo las condiciones más extremas, asegurando que estén listos para cualquier desafío.