La demanda de SUVs con toque deportivos está al alza y la armadoras están escuchando a los compradores, por eso Hyundai decidió tomar su Tucson y poner el sufijo N-Line, con el cual le aportará un estilo estilizado en el exterior y el interior, así como más equipamiento.
Entre lo cambios se pueden contar parachoques y faldones laterales más deportivos, llantas de aleación más grandes y con diseño específico, nuevo difusor, un spoiler trasero y una doble salida de escape.
En el interior tendría acabados en piel hasta en el volante, así como un sistema de infoentretenimiento con una pantalla táctil de 8 pulgadas que se puede conectar a Apple CarPlay t Android Auto.
Esta versión N-Line contará con una versión semihíbrida que a demás del motor V4 de 2.0 litros que utiliza, iría soportado por un motor de 48 V.
Por ahora se sabe que este modelo llegará a Europa primero pero no hay más información sobre otros destinos donde se pueda comprar.