Pese a la competencia desleal, el sector crece paulatinamente año con año, por lo que los empresarios aún apuestan por su desarrollo en el país. 
A paso lento, pero seguro, la industria llantera de México actualmente se encuentra en periodo de recuperación, que si bien no es el ideal de los empresarios del sector, si es un panorama alentador que demuestra el potencial que tiene el país en la materia.
Lo anterior, a pesar de la difícil situación que atraviesa la industria llantera con la llegada de neumáticos de dudosa calidad y que cada año aumentan su participación en territorio nacional.
“Tenemos una competencia desleal porque están entrando llantas con precios muy abajo, con precios de dumping. No tienen permiso de importación, además de que no cumplen con la norma oficial mexicana y eso afecta mucho a la industria establecida en México, por lo que las plantas fabricantes están en una desventaja muy notoria”, destacó Felipe Lezama, presidente de la Asociación Nacional de Distribuidores de Llantas y Plantas Renovadoras (Andellac) en entrevista para Alianza Automotriz.
Incluso, dijo, esa situación provocó la salida de varias plantas del mercado mexicano. Sin embargo, el potencial de la industria aún es grande, por lo que los fabricantes ya están anunciando nuevas plantas e inversiones. “Algunas instalaciones son exclusivamente para fabricar y exportar, y en otras para producir llantas más económicas, con calidad, para contrarrestar a las importaciones ilegales”.
En este contexto, Rubén Albarran, director general de la Andellac, aseguró que el cierre de plantas no es preocupante. “La industria llantera en México está como se merece. Es decir, no tenemos algunas fábricas, pero las firmas están presentes mediante la importación, como lo es Goodyear”.
Añadió que actualmente se consumen en el país alrededor de 25 millones de llantas, de las cuales el 60 por ciento son importadas, tanto de manera formal realizadas tanto por Goodyear, Michelin, Pirelli, entre otras marcas, como las de dudosa procedencia.
El directivo dijo que de ese porcentaje, cerca del 10 por ciento es únicamente de importaciones de contrabando, cifra que va en aumento año con año.
“Este hecho si nos hace mal, pero el mercado en general está bien. Ojalá que nuestras autoridades pongan más atención y no dejen entrar a territorio nacional llantas sin la norma oficial mexicana”, señaló Rubén Albarran.
No obstante, añadió, otro de los problemas que vive el sector es el de los sindicatos, pues desde hace 50 años se vive con el sindicalismo, que ha atrasado al país 30 0 40 años. “Pero decir que estamos mal, es una mentira, ya que tenemos llantas, productos, novedades y traemos lo más innovador de Estados Unidos y de Europa”.