5 Tips para convertir la crisis en oportunidad
Toda empresa en crisis tiene un momento propicio para hacer una implementación para promover mejoras, pues se le ha regalado un punto de partida. El punto de partida para transformar la crisis en oportunidad, es el momento idóneo para introducir metodologías como la esbelta, misma que motiva a las empresas a crear la agilidad y la capacidad de respuesta a los clientes, sobreviviendo a los desastres, incluso naturales:
1. Concentrarse en lo controlable
¿En su empresa existe la costumbre de eliminar el desperdicio en cada parte de su operación? Los “siete desperdicios”, de acuerdo con la Manufactura Esbelta o Manufactura Lean: defectos, sobreproducción, inventario, exceso de movimiento, sobreprocesamiento, transportación y esperas; deben evitarse y se debe buscar su eliminación cada día. Si la maleza ha empezado a crecer, entonces deberá ser removida. La muda, que en japonés significa desperdicio, es cualquier otra cosa como equipo, materiales y mano de obra que no agregan valor esencial al producto o servicio.
2. Aprovechar los beneficios de crecimiento con Creatividad e Innovación
Eliminar los pasos que no agregan valor y reducir desperdicios en los procesosaumenta la calidad, mejora los tiempos de entrega y reduce los gastos de capital. TBM Consulting Group enfatiza repetidamente: “La Creatividad antes que el capital”. Encontrar maneras de eliminar el desperdicio, resolver problemas y realizar mejoras sin utilizar dinero. Para ello, es necesario escuchar al cliente, trabajar en equipo, tener inventiva, ingenio y creatividad.
La mayoría de las personas creen que la innovación implica contratar expertos y exprimirles el cerebro para obtener nuevas formas de pensar. En un mundo en donde los clientes dirigen la entrega de bienes y servicios, la innovación significa descubrir qué es lo que los clientes buscan y lo que valoran. Con ello, una empresa puede crear lealtad a su marca, satisfaciendo los requerimientos conscientes e inconscientes de sus clientes, ofreciéndoles soluciones oportunas, creativas y de bajo costo. Esto es valor de innovación en su nivel más básico y no requiere de expertos.
3.Crear una visión unificada
Se puede iniciar observando y entendiendo la visión de la compañía. ¿La organización tiene una clara y sólida dirección o parece estar perdida e intentando sobrevivir?
Comunicar la visión con todos en la organización es esencial, de esta manera se puede definir el papel de cada integrante y elaborar un plan de trabajo para lograr la visión. La comunicación acaba con la especulación y permite el trabajo en conjunto para mejorar la empresa.
4. Escuchar a los clientes y sincronizar la Cadena de Valor
Estar cerca de los clientes para revelar necesidades no expresadas. Acercarnos a ellos es esencial para eliminar productos, servicios o conductas inútiles. Por ejemplo, cuando se escucha a los clientes pero no se les responde, el mensaje que se está enviando es que realmente a la empresa no le importa lo que ellos piensen.
¿Qué tal la cadena de suministro? Por mucho tiempo se ha tenido un enfoque de adversarios con los proveedores. Contar con una sociedad en sincronía con ellos es crítico. Cada paso que se toma para entregar productos a los clientes es un eslabón de una cadena, que se extiende desde el consumidor a través de su empresa a los proveedores. Cada eslabón representa pasos que, o bien añaden o restan valor a los productos que siguen la cadena. El propósito de una cadena de valor es obtener el producto o servicios de la manera más eficiente, a tiempo y con un mínimo de inventario para el consumidor que los requiere. Los eslabones de la cadena fluctúan debido a los cambios en la demanda de los consumidores y la oferta. Una Cadena de Valor Lean sincroniza todos los eslabones para mantener constante el desempeño de la calidad, el costo y la entrega.
5. Ahorrar energía, ahorrar dinero… y de paso, ahorros para el planeta
Los costos de energía en algunas plantas son aún más altos que los costos de la nómina. Por lo que realizar actividades Kaizen de energía puede ayudar a ahorrar dinero, a salvar la planta y tal vez hasta al planeta. También se pueden considerar los costos de transportación; una Cadena de Valor Esbelta nos enseña a cuidar el costo total de los productos. Tenemos que aprender a hacer nuestro trabajo con ingredientes y proveedores locales.
Cuando se ve una empresa a través de los lentes esbeltos y mientras se planea el despliegue de políticas y se avanza en ellos, no hay que olvidar tener en mente las “Tres Rs” de la conservación –Reducir, Reutilizar, Reciclar–; haciéndolos parte de la cultura organizacional. La creatividad y la innovación pueden ayudar a abordar los problemas de costos de energéticos. Esto le proporcionará un doble beneficio: – ahorrará dinero y pondrá de su parte para ayudar al medio ambiente. Cuando los fabricantes se vuelven verdes, todos ganan.
“Siguiendo el ejemplo de Toyota, debemos aprender a aplicar –o reaplicar– los principios esbeltos a todo aquello que se puede controlar dentro de las organizaciones”, comenta Latuga. “El primer paso es regresar a lo básico, replantear y rejuvenecer la iniciativa esbelta, buscando maneras de aplicar principios esbeltos en corto plazo para ejercer control sobre las variables que se pueden controlar”.
Al hacer esto, se asegura que su empresa resista lo inesperado, incluso terremotos y tsunamis para poder navegar en la constante corriente de un mundo en constante cambio.