Lexus México redefine el lujo con el lanzamiento de su nueva campaña “The Standard of Amazing”, un concepto que pone en el centro no solo la innovación y la tecnología, sino también la conexión emocional entre conductor y vehículo.
Inspirada en el principio japonés de Omotenashi —una hospitalidad que anticipa las necesidades— y en la maestría de los artesanos Takumi, esta iniciativa refleja una visión más íntima y humana del lujo automotriz. Para Lexus, un auto que no emociona se queda a un paso de lo verdaderamente asombroso.
A lo largo de su historia, Lexus ha perfeccionado su capacidad para crear experiencias que van más allá de la movilidad. “No se trata simplemente de ir de un punto A a un punto B, sino de disfrutar cada momento del trayecto”, explicó Luis Pérez, Vicepresidente de Servicio al Cliente y Lexus de México. “Estamos redefiniendo lo que significa el lujo: una conversación entre belleza, funcionalidad y emociones”, añadió.
Innovación con propósito
Desde sus inicios, Lexus ha sido pionera en integrar tecnologías que elevan la experiencia del conductor. En 1989 cambió las reglas del juego con el LS 400, redefiniendo el lujo en el mercado estadounidense. Posteriormente, en 1998, creó el segmento SUV premium con el RX 300 y en 2004 introdujo el primer SUV híbrido del mundo, el RX 400h. Este legado de innovación hoy se pone al servicio del usuario, en forma de tecnología intuitiva, silenciosa y emocionalmente resonante.
Lexus propone una visión del lujo donde cada innovación tecnológica busca servir con elegancia y emocionar con precisión. El silencio en el habitáculo, por ejemplo, no es ausencia, sino intención: un espacio diseñado para el confort profundo y la conexión con uno mismo.
El inicio de una nueva etapa
Con “The Standard of Amazing”, Lexus México inaugura una etapa centrada en las emociones, la cultura y la experiencia personalizada, fortaleciendo su identidad como marca líder en híbridos a nivel global. Este nuevo enfoque busca crear momentos memorables y auténticos entre el vehículo y su conductor.
Para Lexus, el verdadero lujo no es un producto: es una experiencia que conecta, entiende y transforma. Así, el estándar del asombro ya no se mide solo en tecnología, sino en lo que te hace sentir.