Los módulos BCM (Body Control Module) son unidades encargadas de monitorear y controlar diversos sistemas del automóvil, como los de alarma, seguros, luces, limpiaparabrisas, elevalunas, entre otros.
Este dispositivo es esencial para controlar numerosos sistemas eléctricos del vehículo; guarda y analiza información de los sensores, quienes permiten un correcto funcionamiento de los componentes electrónicos.
Es importante mantener en óptimas condiciones su funcionamiento, pues los módulos BCM pueden dañarse por algún incidente, como un choque o inundación, así como por el desgaste natural y la exposición prolongada al calor.
Cuando se perciben fallas relacionadas al módulo BCM es necesario acudir con un mecánico o técnico especialista, pues podría afectar la seguridad y el correcto funcionamiento del vehículo.
Elevalunas
En 1926 se introdujeron los primeros sistemas de manivela por medio de engranaje, pues antes de ellos los fabricantes optaban por colocar sistemas de bisagra para la apertura de vidrios y así ventilar el habitáculo del automóvil.
Buscando la comodidad y practicidad de los pasajeros, después de la segunda mitad del siglo pasado se comenzaron a usar sistemas eléctricos, por medio de elevalunas que evolucionaron para trabajar de manera eléctrica.
Los elevalunas son dispositivos, con un carril guiado, que permiten subir o bajar una ventana de manera manual o a través de un sistema eléctrico. También se encargan de sostener una ventana en el nivel deseado.
Los elevalunas eléctricos cuentan con un motor, acompañado por un sistema de engranajes, que permiten realizar sus funciones por medio de control directo o electrónico.
Si las ventanas dejan de funcionar, es posible que el elevalunas tenga un problema con algún fusible, interruptor o la conexión de algún cable, por lo que se recomienda acudir con un especialista para su diagnóstico y reparación.
Seguros eléctricos
Como en el caso de los elevalunas, los seguros eléctricos están ligados al módulo BCM. Son un sistema de seguridad que bloquea las puertas e impide que éstas puedan ser abiertas desde el exterior del vehículo.
Los sistemas de seguros comúnmente tienen actuadores, estos dispositivos permiten abrir y cerrar las puertas gracias a un sistema eléctrico.
Si los seguros eléctricos comienzan a fallar, además de dejar de funcionar, puede ser que el auto detecte que hay una puerta abierta a pesar de que ya se verificó que están todas cerradas.
Asimismo, cuando se activan los seguros vía remota, puede ser que alguno de éstos no se active y deje la puerta abierta. Ante dicha situación, se sugiere asistir con un mecánico automotriz.
Fuente: Grupo CEDVA y DORMAN Products