Es común en la industria automotriz el uso de solventes, aerosoles, gases o pinturas, que van desde la fabricación de las piezas automotrices, hasta realizar algún tipo de reparación.
Estas sustancias químicas producen efectos que son similares a la intoxicación alcohólica o alguna sustancia psicotrópica.
Los principales síntomas son: desinhibición, excitación, somnolencia y perturbación. En algunas ocasiones si se llegan a absorber, en poco tiempo y en una gran cantidad, se puede llegar a perder el conocimiento.
Los químicos antes mencionados se utilizan para distintos tipos de reparaciones.
Hojalatería y pintura
Durante la reparación de la carrocería del vehículo, cuando se prepara la parte a tratar por medio del lijado de la superficie, las partículas de pintura que se desprenden generan un polvo que se transporta por el aire y que puede llegar a las vías respiratorias. Este residuo contiene sustancias tóxicas para el sistema respiratorio, especialmente pulmones y el sistema nervioso.
El principal factor es que la pintura contiene sustancias como plomo o cromo, sin mencionar que, en ocasiones, se utilizan algunas sustancias abrasivas para ayudar a que el desprendimiento de la pintura sea más sencillo y requiera menos esfuerzo físico. Esta mezcla de polvo con la sustancia abrasiva genera un químico altamente tóxico, que no solamente puede ser inhalado, también ser absorbido por la piel.
Cuando absorbe este tipo de sustancias puede ocasionar dermatitis y úlceras en la piel. En casos graves este tipo de irritaciones puede ocasionar alergias crónicas y derivar en efectos cancerígenos.
En el proceso de pintado de carrocería, el aerosol que se utiliza tiene sustancias peligrosas como plomo, cromo, polisocianatos y solventes orgánicos. Los reparadores pueden presentar irritación de ojos, piel, incomodidad al respirar, asma o disminución en su capacidad respiratoria por la exposición a la pintura.
Servicio de mantenimiento
El añadir fluidos al coche para el funcionamiento de distintos elementos puede parecer una tarea fácil, pero también un riesgo a la salud.
Los líquidos que pueden causar problemas son los
Inhibidores de corrosión en el sistema de enfriamiento.
Refrigerantes concentrados para el motor.
Fluidos termo portadores.
Fluidos hidráulicos.
Aditivos carburantes.
Cabe señalar que estos líquidos son altamente corrosivos o irritantes en cualquier concentración y en cualquier cantidad.
Es riesgoso estar cerca de las zonas donde se concentran estos productos, válvulas o bombas. Aunado a esto la manipulación tiene un riesgo de salpicadura o derrame.
Reparaciones generales
Existen una variedad de productos para realizar diversos tipos de reparaciones como: químicos ácidos, químicos básicos, para limpieza, para tratamientos en plásticos y gomas según sea la superficie.
Adhesivos: existen distintos tipos de adhesivos para colocar fijamente algún elemento en el vehículo o para cuidar la superficie de alguna pieza.
Los adhesivos son empleados por lo regular en reparaciones muy específicas.
Diversos químicos utilizados para limpieza y eliminar residuos. Un ejemplo claro son los detergentes específicos para coches.
Espumas: Existen diversos tipos con la finalidad de insonorizar, fijar, o disminuir las vibraciones. También se utilizan como impermeable.
Tratamientos superficies: Este material se utiliza para resguardar las propiedades de la pieza en cuestión, es decir, mantenerla en buen estado. Pueden emplearse en metales, partes plásticas, vidrios, acero y fundamentan una guía para proteger contra la corrosión.
Medidas para reducir el riesgo
Para prevenir los daños contra la salud se deberán llevar a cabo ciertas medidas según la actividad.
Una mejora considerable y que no solo protege a la persona que manipula el producto, sino también a los que están a su alrededor es realizar la actividad en zonas aisladas, para resguardar y almacenar correctamente el producto. La zona deberá contar con ventilación continua y de ser posible con un sistema que elimine los vapores que se lleguen a desprender.
El uso de máscaras con filtro es primordial para proteger el sistema respiratorio de cualquier inhalación de vapores y partículas de pintura. El uso de guantes siempre que sea posible para poder manipular adecuadamente dichos productos sin dañar la piel.
La salud es muy valiosa y es de suma importancia, en el taller es vital cuidarla y evitar cualquier riesgo.