Sabino García, Director General de Distribuciones SAGAJI, compartió una reflexión sobre los desafíos que enfrentan las organizaciones en tiempos de incertidumbre.
Durante su participación en el Tercer Congreso Mexicano de Repuestos Automotrices, destacó la importancia de la resiliencia en las empresas y la creación de valor en las mismas, temas muy relevantes en la actualidad debido a los constantes cambios económicos y políticos.
En su exposición, explicó que la pandemia les enseñó que la flexibilidad y la capacidad de adaptación de las empresas es clave para mantenerse vigentes.
La resiliencia es una cualidad que se puede desarrollar e institucionalizar. “Resiliencia significa no solo recuperarse, sino anticiparse y adaptarse a los riesgos”, comentó el director de Distribuciones SAGAJI.
La resiliencia empresarial se basa en cuatro pilares fundamentales: prevención, capacidad de recuperación, adaptación y toma de decisiones ágiles. “Las empresas pueden identificar riesgos y planificar estrategias para enfrentarlos”, puntualizó.
Uno de los puntos clave de su presentación fue la importancia de la matriz de riesgos. Como director de una compañía exitosa comprendió la importancia de conocer los riesgos en el corto y mediano plazo. “Las organizaciones deben mapear los posibles riesgos que podrían afectar su operación, tanto internos como externos, y desarrollar planes de acción para mitigar estos riesgos. La preparación y la planificación son esenciales para enfrentar la incertidumbre”, afirmó.
En este camino rumbo a la construcción de las marcas, Sabino García recalcó la importancia de que los colaboradores de la empresa conozcan los mantras que no es lo mismo que la misión, el mantra es la frase que resume las cualidades de la empresa.
“Toda la empresa tiene que ir alineada a este concepto. No se tiene que aprender la cultura organizacional, filosofía, valores, mientras la gente y ustedes estén convencidos de una frase que resuma su objetivo van a suceder cosas buenas”, apuntó.
El directivo destacó que los activos más importantes en una empresa no son solo los económicos, sino las personas que la componen.
La cultura organizacional, el propósito y los valores compartidos son la base para construir una empresa sólida. Además, recomendó construir una marca fuerte y en ofrecer productos o servicios que realmente resuelvan las necesidades del mercado, sin perder de vista la adaptabilidad y la innovación.