Cuando algo está mal con la culata del auto solo se pueden esperar malas noticias y costos elevados para la reparación, además los problemas pueden ser varios, desde una junta en mal estado hasta roturas en la pieza. ¿Pero cuáles son los síntomas de que algo está mal?
La culata es una parte esencial del motor y se atornilla encima de donde están montadas las válvulas, árboles de levas, colectores de admisión/escape y todos los accesorios de alimentación de combustible, de ahí su importancia.
Síntomas de problemas con la culata
El síntoma más obvio de que algo va mal con la culata es el humo del escape el cual sería denso y con color blanco, señal de que el anticongelante está pasando a la cámara de combustión.
También se puede notar un menor rendimiento del coche, así como tirones acompañados del humo referido. Dificultad para arrancar es otro síntoma.
Algunas de las señales no son tan obvias como una mayor presión en el circuito de refrigeración por lo que podría haber roturas de manguitos de refrigeración o depósito de expansión.
Otra forma de comprobar está presión excesiva es abrir el vaso de expansión y arrancar el motor. Si a medida que la temperatura sube hay burbujas de aire, es una mala señal.
Si una avería de culata es tratada a tiempo, es posible que con un rectificado de la culata y una nueva junta tengamos motor para muchos años más.