Para afrontar la fuerte competencia en el sector, los talleres automotrices realizan adecuaciones tecnológicas en sus equipos y herramientas, con el objetivo de dar un mejor servicio y garantías al cliente. Ante el creciente parque vehicular nacional, el cual, de acuerdo con el Sistema de Información del Sector Automotor Mexicano (Sisam), se incrementó de 15.3 en el 2000 a 21.4 millones de unidades en 2005, cada año se avecina un gran reto para los talleres de la reparación, que para ser rentables tienen que equiparse con las herramientas más innovadoras del mercado.
Lo anterior, debido a que anualmente se introducen al país más de un millón de autos nuevos, más los vehículos usados provenientes de Estados Unidos, principalmente.
Sólo en el Distrito Federal, actualmente existe un parque vehicular cercano a los 5.5 millones de unidades, de ellos, a decir de la Secretaría de Transporte y Vialidad (Setravi), 50 por ciento son de modelos viejos; 90 por ciento cuentan con motor a gasolina; y el 10 por ciento, que incluye camiones de transporte, carga y pasaje, utiliza gas licuado, gas natural y electricidad, lo que incrementa el compromiso por atender la gran diversidad de motorizaciones.
Es así que la actual situación, obliga a los talleres de reparación automotriz a incorporar constantemente nuevos equipos y herramientas que les permitan profesionalizarse con el propósito de realizar un trabajo eficiente para sus clientes.
A ello se suma, que estos establecimientos cuenten con personal calificado, con amplios conocimientos, capaz de sacar provecho a los equipos y herramientas.
Rudi Esquivel Bolaños, presidente de la Confederación Nacional de Talleres de Servicio Automotriz y Similares (CNT), aseguró que hoy en día existen grandes retos que involucran a todo el sector automotriz. Por ello, uno de los propósitos de la asociación y de otros organismos del ramo, es la generación de programas encaminados a la profesionalización y fortalecimiento del sector, los cuales requieren de la participación y apoyo de los fabricantes de equipos y herramientas, especialmente en el área de capacitación.
Innovaciones
Un servicio de alta calidad exige la integración de los recursos necesarios para la reparación, así como tener la capacidad de respuesta y atención al consumidor en el menor tiempo posible.
Alberto Nolasco Estrada, gerente de formación y divulgación del Centro de Experimentación y Seguridad Vial México (Cesvi), explicó que en la actualidad hay un promedio de mil 87 talleres inscritos en el organismo como centros de reparación cien por ciento profesionales que cuentan con los equipos y herramientas idóneos para dar un servicio de calidad.
Sin embargo, admitió, también hay un número desconocido de talleres que operan sin garantías y herramientas necesarias.
Señaló que entre las innovaciones tecnológicas que van ganando terreno en los talleres de reparación automotriz están las máquinas soldadoras para todo tipo de aceros automotrices, incluido el aluminio.
“Los bancos de estiraje y los sistemas electrónicos de medición son equipos de alta tecnología; asimismo, las rampas de estiraje, los escáner, y las alineadoras y balanceadoras digitales nos permiten tener un negocio bien equipado”, refirió.
Resaltó que la tendencia tecnológica en esta industria se centra en una menor participación física del operario, es decir, que las herramientas ahora hacen el trabajo más rudo con mayor precisión, por lo cual la sistematización es parte de los talleres más sofisticados.
Agregó que para operar un taller que ofrece calidad y servicio, éste debe contar con equipos, herramientas y sistemas que emulen el proceso de fabricación de una unidad, tales como soldadoras, herramientas neumáticas, kits de reparación de plásticos y cristales, pistolas HVLP, pinturas a base agua y cabinas de horneo.
Por su parte, Raúl Pérez Aguilar, jefe de servicio de Meineke Car Care Center, sucursal Insurgentes, comentó que entre las herramientas indispensables que definen un buen servicio se encuentra el escáner, herramientas manuales, llaves especiales y multímetros.
“La parte electrónica es una de las bases más importantes para funcionar de manera eficiente, es lo que nos da acceso a todos los componentes de un motor”, añadió.
Según el especialista, un buen departamento de mecánica de colisión debe disponer de herramientas de grado profesional, como son: rampas de elevación, escáneres, balanceadoras y alineadoras, entre otros.
Administración
Además de sofisticados equipos para la reparación, también predominan sistemas que permiten administrar correctamente todas las áreas del taller.
Por ejemplo, Audatex, que con la intención de perfeccionar el servicio al interior de los negocios, ofrece un programa para estandarizar el control de costos en las reparaciones.Dicho sistema, proporciona información sobre tiempos y costos de servicio, basados en una estadística de más de 350 modelos de autos, equivalentes a casi el 92 por ciento de la oferta que se ha comercializado en el país durante los últimos 10 años.
La firma cuenta con el respaldo directo de fabricantes automotrices y centros de investigación, que le apoyan a estandarizar la información y generar detalles sobre tiempos y costos de las reparaciones.
Este tipo de herramientas, hacen que los talleres mecánicos sean más eficientes en las reparaciones y en los tiempos exactos de entrega al cliente.
Inversiones
Para muchos propietarios y especialistas de la mecánica, el tener un taller en las mejores condiciones operativas va más allá de las buenas intenciones.
“El precio de mantener un taller equipado con la más avanzada tecnología es muy alto, principalmente porque el herramental y materiales son importados, lo que significa invertir fuertes cantidades de dinero que dependen de la capacidad instalada de cada negocio; pero que con una buena administración, trabajos puntuales y de calidad, el retorno de la inversión puede ser más rápido”, mencionó Nolasco Estrada.
Asimismo, Raúl Pérez Aguilar, de Meineke Car Care Center, coincidió en que el costo de mantenerse a la vanguardia resulta elevado, debido a que constantemente salen autos nuevos. “Hay herramientas con precios que van más allá de los 80 mil pesos, es un precio que tratamos de no reflejar en el costo de servicio final al cliente”.
Explicó que en su caso, el negocio funciona bajo una franquicia, por lo que se requiere de una doble responsabilidad, al cumplir con los objetivos personales, con el dueño y con la marca que lo respalda.
“En promedio damos mantenimiento a cerca de 150 autos mensuales, y ponemos mucho énfasis de nuestra parte para no tener reclamaciones ni fallas técnicas”.
Cabe mencionar que los talleres que operan bajo la modalidad de franquicia, tienen la posibilidad de constituir un establecimiento bien equipado con inventario, capacitación con cursos técnicos, manuales, y asistencia técnica, entre otros recursos administrativos.
Gastos alternos
Celestino Guzmán Hernández, encargado de Llantera Insurgentes, detalló que mantener el negocio a la vanguardia representa un alto costo que no sólo radica en la herramienta, sino en inversiones alternas como la renta del terreno, construcción y remodelación de la imagen corporativa.
“Para consolidar una compañía exitosa, buscamos adquirir lo más avanzado en herramientas de marcas reconocidas en el mercado; hay piezas que pueden ser muy baratas, pero no ofrecen la misma funcionalidad. Esto se traduce en un mejor servicio al cliente y tener la certeza de que estamos a la vanguardia”, reiteró.