Sebastian Vettel atrajo los reflectores por su victoria en el Gran Premio de Japón al colocarse a solo cuatro puntos de Fernando Alonso, en el Campeonato de Pilotos, luego de que, al inicio de la carrera, el piloto de la escudería Ferrari saliera de la competencia por causa de una colisión.
Vettel fue seguido hasta la bandera de cuadros por Felipe Massa, piloto de Ferrari, quien le tomó dos años conseguir su primer podio; detrás, iba Kamui Kobayashi, piloto de Sauber, quien fue el tercer lugar y se convirtió así en el primer piloto japonés de pie en un podio local desde el Gran Premio de Aguri Suzuki en 1990.
La victoria, tercera de Sebastián en Suzuka en cuatro años, se definió a lo largo de la carrera en la primera curva. Partiendo desde el pole, el campeón defensor se escapó limpiamente y mantuvo el liderato en dicha curva.
No obstante, detrás de él, las cosas fueron a menos, cortadas y secas. Su compañero de equipo Mark Webber, segundo en arrancar, fue rebasado por Kamui Kobayashi, de Sauber. Para entonces, Mark se encontraba junto a Romain Grosjean, de Lotus; quien chocó con la parte trasera del RB8 de Mark.
Los daños provocados por el choque enviaron a Mark a la línea de pits para una revisión de seguridad y para una nueva nariz y neumáticos al final de la primera vuelta, dejándole un largo camino hacia la recuperación desde atrás. La carrera se reinició antes de que él se uniera lo que le significó 20 segundos de retraso.
Mientras tanto, Fernando Alonso se encontraba bajo la presión de Kimi Raikkonen, quién empezó justo detrás de él. Sin embargo, el piloto de Lotus había cometido un error al meter una rueda en el césped, mientras perseguía a Alonso. La pérdida momentánea del control fue suficiente para que se estrellara en la parte trasera del vehículo de Ferrari y el líder del campeonato quedara repentinamente fuera de la carrera en una nube de polvo.
Los problemas de Alonso eran todo el incentivo que Sebastian necesitaba. Después de un breve período de revisión de seguridad del automóvil, se apresuró logrando una ventaja de 11 segundos para el momento en que se lanzó hacia los pits para su primera parada. Salió con su liderazgo intacto y durante las siguientes 20 vueltas, extendiendo su ventaja, mientras que detrás de él sus rivales peleaban por las posiciones de podio restantes.
En la vuelta 37 y en su última parada, Seb fue nada menos que 35 segundos delante del segundo clasificado Felipe Massa, y con su incuestionable liderazgo, el campeón logró una vez más la victoria, lograda, por supuesto, por su casi tradicional explosión de últimos minutos en busca de la vuelta más rápida de la carrera.
Eso se realizó en la vuelta 52 y con la vuelta púrpura en la bolsa, Seb se alzó con el segundo gran Chelem de su carrera con posición en el pole, la victoria en la carrera, la vuelta más rápida y todas las vueltas de la carrera a la cabeza. El más reciente Chelem fue logrado en la India en 2011.
Respecto de Webber, era una tarde difícil para él. Después de su accidente en la primera vuelta, se encontraba justo atrás del campo en el puesto 22, pero sobre neumáticos fuertes y preparado para una larga temporada.
Pronto comenzó a abrirse camino a través del campo y, en el momento que hizo su única parada reglamentaria, se encontraba en la 10ma. posición en puntos. Después de eso, todo se trataba de consolidación y el australiano finalmente terminó noveno al anotar dos puntos después de un gran impulso.
Con un recorrido de 27 puntos desde el Gran Premio de Japón, se ha ampliado el liderazgo para el equipo Red Bull Racing en el Campeonato de Constructores y con 324 puntos en su haber se tiene una ventaja de 41 puntos sobre McLaren, para el cual Jenson Button y Lewis Hamilton terminaron hoy en cuarto y quinto lugar.
No obstante, la noticia de primera plana es que con tan sólo cinco carreras restantes, Sebastian, con 190 puntos, se encuentra a sólo cuatro detrás de Alonso. Desde el verano, el actual campeón ha registrado 68 puntos.