La firma proveedora de polipropileno expandido para la industria automotriz, JSP México, ubicada en Toluca, Estado de México, subsidiaria de JSP Corporation ubicada en Tokio, Japón, confía en que 2021 será un mejor año para la proveeduría de componentes.
En entrevista con Alianza Automotriz, Ramiro Escobedo, director general de JSP México, destacó que tras haber enfrentado el cierre de las plantas a raíz de la pandemia de COVID-19, la empresa logró recuperarse, aunque no a los niveles que traían antes de la pandemia.
“Lo que se produce en México es para abastecer al mercado nacional, por lo que dependemos 100% de la producción de autos en el país. La meta de manufacturar arriba de 3.5 millones de autos en 2021 nos da la confianza de que será un mejor año para los proveedores, una vez que nuestro país se beneficia de la compra de autos en Estados Unidos”, explicó.
Comentó que actualmente, JSP hace la materia prima para las empresas que moldean las piezas de espuma plástica de polipropileno que van en la cajuela del automóvil, como es el caso del portaherramientas donde va la llanta de refacción. Otra de las aplicaciones, es debajo de la fascia donde se coloca para que en impactos a baja velocidad, ésta no quede sumida.
Destacó que hoy en día trabajan con todas las marcas de autos, excepto KIA y Hyundai, quienes tienen un proveedor coreano, aunque no descartó poder surtir también a ambas marcas.
¿Cómo funciona?
Ramiro Escobedo explicó que el polipropileno se trae de Estados Unidos y en México se espuma, es decir, se llena de aire, dependiendo del espesor y densidad que requiera el cliente.
Comentó que, en los últimos años, la industria automotriz ha aligerado los autos para que tengan un mejor rendimiento, por lo que este tipo de aplicaciones, es esencial para absorber los impactos.
No obstante, en lo que más ha crecido JSP es en la proveeduría de materiales para asientos y cajuelas, “en los asientos se reemplaza el alambre empleado en los resortes para disminuir la cantidad de poliuretano, entonces lo que hacemos, es el alma del asiento, para que sea más delgado, más ligero y con menos metal, tanto el respaldo como la parte del asiento tienen componentes de JSP.
Con esta modificación, el fabricante de autos puede bajar hasta 1.5 kilogramos el peso en un asiento individual, lo cual se traduce en importantes ahorros en el peso total de la unidad y en ahorro de combustible.
Adicional, la compañía también desarrolla aplicaciones con otros aditivos, por ejemplo, un retardante de flama para disminuir el riesgo de un incendio.
Los retos para las empresas Tier 2 y Tier 3
A decir del director general, aún con la confianza de que 2021 será un mejor año, existen retos que las empresas proveedoras de componentes deben afrontar, por ejemplo en materia energética.
“El hecho de que el gobierno le apuesta a las energías no renovables, hace que entremos en una desventaja, porque tienden a ser más caras. Nosotros estamos conectados a un parque eólico, lo cual, indirectamente representa un beneficio y en el momento en que se comienza a promover menos este tipo de energía hay una desventaja”, afirmó.
Los otros desafíos están en los impuestos que pagan las empresas y finalmente, la situación económica del país que coloca a todas las industrias en una situación complicada, aún con lo que representa el sector automotriz a nivel global.