| César Flores: “Sólo hay que ponernos las pilas” |
 México cuenta con grandes oportunidades y retos que enfrentar para empezar a crecer su mercado interno. Ahora tiene el gran obstáculo de los vehículos ilegales, mientras exista esa práctica y no puedan controlarla no conseguirá avanzar. “Yo no digo que la eliminen, pero si que la controlen convirtiendo en política pública este fenómeno para ir eliminando los beneficios del negocio ilegal. Si lo logramos vamos a tener éxito”. |
Lo anterior fue comentado por César Flores Esquivel, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) en entrevista con Alianza Automotriz. “Para muchos pareciera tedioso el tema de los autos “chocolate”, sin embargo es un asunto que no podemos dejar pasar. Y es que verdaderamente nos preocupa que se otorgue carta de naturalización a esos más de 2.5 millones de autos que han entrado al país en forma ilegal. Por esa razón hacemos eco de la postura de la Asociación”.
Pese a dicha situación, el dirigente de AMIA señala que nuestro país está haciendo su propia labor de ser competitivo y ahora los vehículos usados son baratos, porque los nuevos, actualmente se adquieren con financiamientos largos, tasas altas y facilidades.
“De tal manera que el reto del crecimiento del mercado interno se encuentra enfocado básicamente a eso, con una serie de medidas de política pública que están avanzando, como son el registro público de vehículos y los financiamientos agresivos de los bancos, ya no sólo de las empresas financieras automotrices”.
Por otro lado, está el control de la normatividad, el cumplimiento de las emisiones de gases y los aspectos de seguridad de los vehículos. Con ello va a ir avanzando el mercado siendo más competitivo para homologarse en las condiciones de competitividad de circulación que tienen en E.U. y Canadá. “Parece como un idealismo, pero estamos seguros que pronto vamos a llegar a cosas similares en el sector automotor de lo que sucede en esos países”.
Según César Flores es evidente que la industria empieza a tener una sincronización con esos mercados, que los financiamientos que hoy se dan en México a 60 meses, sin intereses, nunca se habían escuchado en la historia del país, “pero lo hemos ido trasladando del sistema estadounidense que ha demostrado que estos sistemas son los que funcionan para aumentar las ventas y la rentabilidad de las empresas”.
“Yo creo que vamos a lograr ser un país competitivo en unos pocos años si como dicen coloquialmente por ahí “nos ponemos las pilas” y que las políticas públicas comiencen a funcionar”.
Otra parte de competitividad para nuestro país, que es importante para seguir siendo una nación atractiva a las inversiones, es que deben continuar con los aspectos de hacer fructífera la cadena productiva, no solamente en ensamblado o con los proveedores grandes, sino también tener pequeñas y medianas empresas que se incorporen a la competitividad mundial y que sean objeto de un crecimiento dentro de toda la cadena en estos términos de competitividad.
Más información en Alianza Automotriz 315 junio de 2005