México encabezó el listado de países latinoamericanos que registraron mayor número de periodistas muertos en el ejercicio de su profesión durante el 2004, las estadísticas anotan tres muertos, dos detenidos, 15 agredidos, 13 amenazados, a 10 los citaron las autoridades para revelar sus fuentes y siete medios de comunicación fueron atacados o censurados.
Las cifras, dadas a conocer por la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF), revelan que en nuestro país la profesión de periodista es extrema o de alto riesgo.
El panorama para el 2005 se vislumbra similar, pues en lo que va del año, ya se registraron dos casos de periodistas muertos y el más reciente es el de Alfredo Jiménez Mota, reportero de El Imparcial, quien hasta el momento continúa en calidad de desaparecido.
El presidente Vicente Fox le echó más lumbre al fuego cuando recientemente se refirió a los medios de comunicación a quienes acusó de “refritear” la información de los sucesos de Ciudad Juárez.
“Nos ofende lo que ha pasado en Juárez, pero tampoco es correcto estar “refriteando” sin información, los mismos casos, los mismos 300 o 400 casos de mujeres,” dijo el mandatario.
Desde este modesto espacio nos sumamos a las voces que exigen se respete el derecho a la libertad de expresión en México, en América Latina y en el mundo entero. No más asesinatos por este motivo ni por ningún otro.
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