A pesar de que en 2008 el Chevrolet Cruze fue uno de los salvavidas de la empresa ante la crisis que sufría, la marca de General Motors anunció que como parte de una reestructura financiera y de negocio y por las bajas ventas dejará de producir el auto, con lo que oficialmente se queda sin sedanes compactos en su catálogo.
Con esta decisión se pone fin a los 49 años de historia del coche y también a su planta de Ohio, donde se construía el modelo, y de donde serán despedidas poco más de mil 500 personas, y aunque 400 aceptaron ser trasladadas, otros trabajadores ya interpusieron una demanda contra el fabricante por no cumplir con la negociacón que dictaba que el cierre sería hasta septiembre.
El último Cruze fabricado fue una unidad blanca de la versión LT con motor turbo de 1.4 litros, al que los trabajadores despidieron al final de la línea de producción.
Chevrolet había manejado sedanes compactos desde 1970 con la introducción del Vega, el Monza, el Cavalier, el Pontiac G4 y por último el Cruze.
Este modelo recibió una renovación el año pasado pero al poco tiempo se decidió descontinuarlo, es por eso que a México no llegará la versión 2019 y solo se acabarán de vender las versiones 2018 que hay en stock.
General Motors lleva meses en un proceso de reestructuración tanto de su parte financiera, que le ha llevado a cerrar plantas, hasta de su catálogo, del cual anunció que lo renovaría este año.