| China: sorprendente ascenso |
 Es admirable el despegue comercial de la República Popular China que, después de ser una sociedad modesta y agrícola, se ha convertido en un fenómeno que asombra al mundo con su vertiginoso desarrollo industrial, económico y comercial, sobre todo, por la firme decisión de su gobierno de querer modernizarlo. |
Es admirable el despegue comercial de la República Popular China que, después de ser una sociedad modesta y agrícola, se ha convertido en un fenómeno que asombra al mundo con su vertiginoso desarrollo industrial, económico y comercial, sobre todo, por la firme decisión de su gobierno de querer modernizarlo.
Wang Qingyuan, consejero comercial de la Embajada China en México, comentó que la política de apertura al exterior inició en 1978 con la reforma económica. A partir de entonces, el gobierno aplicó una serie de medidas en los mercados interno y de exportación que se coronaron con su ingreso a la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Ahora el país oriental abre cuidadosamente sus puertas al mundo, su principal interés, negociar con empresas mexicanas de la industria automotrìz y de manera específica, autopartes, debido a la importancia de su mercado, reflejo de ello es su 7.6 por ciento más en comparación del 2003 y que le permitió alcanzar los 27 mil 273.5 millones, según el Sistema de Información del Sector Automotor (SISAM).
Interés por autopartes
El gigante asiático hace inversiones fuertes en autopartes y, en este rubro, el comercio es dinámico. Diversas empresas chinas fabricantes de autopartes, mantienen altos volúmenes de exportación a EU por lo que consideran el asociarse con mexicanos a través de empresas de capital mixto.
La producción automotriz total en 2004 fue de 5 millones 070 mil unidades, el 30 por ciento de empresas nacionales y el 70 por ciento de extranjeras. Los vehículos ligeros sumaron 2 millones 230 mil y en camiones, camionetas y autobuses casi llegan a los tres millones.
Importaciones chinas
El año pasado la importación de automóviles terminados y autopartes superaron los 5 mil 470 millones de dólares, ocupando la segunda, la mayoría. Las firmas automotrices más importantes del mundo ya tienen inversiones en aquel país.
En nuestro país -dice Wang Qingyuan-, antes de ingresar a la OMC, y hasta finales del año pasado, cuando una empresa quería importar automóviles tenía que pedir una licencia de importación, como en México, pero a partir del primer día de enero de este año ya no es necesario. Sólo se pagan impuestos de importación. Tampoco existe una cuota específica.
China es uno de los países con mayor producción automotriz. Cuenta con diversas marcas de autos, así como prestigiadas empresas de autopartes a nivel mundial. Producen tanto para el mercado externo como para abastecer su creciente demanda interna, razón por la cual llevan a cabo una gradual apertura a importaciones que se manifiesta en la disminución del arancel promedio para las importaciones de estos productos.
Para el consejero comercial y económico de la Embajada China en México, este acuerdo firmado con la OMC benefició a su país con la disminución en aranceles.
Antes del 2001 el sector automotriz tenía aranceles altos. En los últimos tres años se han reducido sustancialmente. Para el 2006 los autos terminados bajarán 25 por ciento, a diferencia del 30 de este año. De igual manera las autopartes llegarán hasta el 10 por ciento.
Es importante resaltar que este país es el productor y consumidor más grande del mundo en acero, el mayor receptor del Foreing Direct Investiment (FDI) (Inversión Directa Extranjera) y el responsable del 25 por ciento del crecimiento de la industria automotriz a nivel mundial. En sólo cinco años será el número uno en exportaciones de bienes a Estados Unidos, sobrepasando a Canadá; el tercer productor de automóviles en el mundo, después de EU y Japón, y el segundo mayor importador después de EU.
Tecnología de punta
Hoy en día, en China se fabrican automóviles y camiones a pesar de que la tecnología automotriz no es tan avanzada como en los países occidentales, sin embargo, los capitales de origen extranjero le han permitido tener acceso a tecnología de punta y procesos modernos de la administración.
Prueba palpable de lo anterior es que están funcionando 30 plantas de automóviles, la mitad son de origen extranjero y la otra parte nacionales. Los capitales foráneos siempre buscan invertir en sociedad. Hasta el momento no existe una compañía del exterior que lo haga de manera independiente.
En China existen en total 300 empresas de todo tipo de producción de vehículos, coches ligeros, diversos tipos de camiones, carros especiales, blindados, ambulancias, etc. Algunas de éstas compran chasis y motores y luego construyen un cajón para hacer una unidad completa.
Precios China/EU
Al igual que muchos otros países, China maneja de determinada manera sus costos por lo que después de 1978 buscaron una política de apertura exterior y de reforma económica se ha modernizado al abrirlo más hacia un sistema de mercado.
El gobierno ya no controla los precios, no interviene en la administración empresarial, eso depende del mercado. Las empresas pueden fijar sus costos tanto para el comercio interior como exterior. Se adaptan al precio de acuerdo a la ley de la oferta y la demanda. Las compañías -estatales y privadas- se responsabilizan de sus propias pérdidas o ganancias.
China tiene un sistema de cambio de divisas flotantes a cargo del Banco Central, sin embargo, es el mismo gobierno quien lo administra.
Estamos preparados para aceptar estos cambios, dice Wang Qingyuan, quien agrega que su gobierno se encuentra elaborando un programa para hacer algunas modificaciones, tanto en divisas, como en el sistema financiero, con el objetivo de que en un futuro el cambio pueda ser totalmente libre.
Más información en Alianza Automotriz 313 abril de 2005