En presencia del presidente de la Republica, Felipe Calderón, Volkswagen ratificó la inversión de un mil millones de dólares en México, anunciada en febrero del 2008. El proyecto al cual se destinaron estos recursos incluye el desarrollo de un nuevo modelo y la ampliación de sus instalaciones en la planta de Puebla, la cual representó una inversión de 410 millones de dólares.
Este nuevo modelo será producido exclusivamente en México y se estará ensamblando a partir del 2010 para los mercados mundiales.
Otto Lindner, presidente del Consejo Ejecutivo de Volkswagen de México, confirmó: “los objetivos estratégicos de Volkswagen se mantienen firmes; queremos seguir creciendo en México, como fabricantes y como líderes en el mercado. Nuestros nuevos modelos son la base de este crecimiento y estos van a ser desarrollados aquí. Además continuaremos incrementando nuestro volumen de compras en Norteamérica, especialmente en México”.
El crecimiento de la planta de Volkswagen en Puebla, permitirá a la armadora incrementar su capacidad diaria de producción en 300 unidades más, para alcanzar una capacidad de dos mil 100 unidades por día.
El resto de la inversión se aplicará a los herramentales con los que los proveedores fabrican las partes del vehículo, pero sobre todo, al desarrollo del nuevo auto, con una importante participación de ingenieros mexicanos.
Esta ampliación es un concepto diseñado y ejecutado con la participación de arquitectos e ingenieros mexicanos, considerando altísimos estándares de seguridad industrial, productividad y protección al medio ambiente.