El Jaguar I-PACE cuenta con una solución denominada electrónica de potencia, desarrollada por Continental e ideal para los trenes motrices deportivos de alto rendimiento como es el caso del modelo eléctrico de lujo de la firma británica, que puede funcionar a corrientes de hasta 650 amperes.
La electrónica de potencia es un componente que actúa de interfaz entre la batería de alto voltaje y el motor eléctrico, siendo al mismo tiempo el canal de alimentación de energía y un control del proceso de recuperación de la misma.
“Al diseñar la electrónica de potencia para el Jaguar I- PACE y el Range Rover Sport Plug-in Hybrid, trabajamos en estrecha colaboración con Jaguar Land Rover para maximizar el potencial de nuestro sistema de generación de corriente, con una orientación muy marcada al manejo deportivo y el alto rendimiento”, dijo Continental en un comunicado.
A decir de Continental, esta tecnología es importante porque los vehículos eléctricos, ya que tienen un desempeño destacado al arrancar, debido a que pueden desarrollar todo su torque instantáneamente desde el alto total, algo en lo que todavía es más atípico un auto como el Jaguar antes mencionado, que puede funcionar a corrientes de hasta 650 amperes.