Busca mejorar los costos de producción automotriz hasta en 50 por ciento, al trabajar con un sistema nuevo de frenos antibloqueo que utiliza microcontroladores de uso genérico.
Una de las mayores preocupaciones para los fabricantes de vehículos es la seguridad, por lo que día a día buscan mejorar los dispositivos en la materia y con ello disminuir los daños por colisión y sus fatales consecuencias.
De esta manera, preocupados por reforzar los segmentos de seguridad en los automóviles, un grupo de académicos de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) plantel Azcapotzalco, desarrolla un sistema de frenado Antilock Braking System (ABS), empleando un microcontrolador de uso genérico, con la intención de reducir los costos de implementación y precio final.
A decir de Carlos Avilés Cruz, investigador del departamento de Electrónica de la División de Ciencias Básicas e Ingeniería de la UAM, pese a que hoy en día muchas unidades incluyen frenos ABS, es común que los consumidores no conozcan a fondo su funcionamiento. Por ello, dicho proyecto, aún en su primera etapa de análisis, tiene como propósito utilizar un microcontrolador de uso genérico capaz de remplazar el sistema de cómputo integrado en los dispositivos comerciales.
“Reunimos nuestro conocimiento y las posibilidades que teníamos para presentar un proyecto viable y aplicarlo en la industria automotriz”, destacó Avilés.
Explicó que el proyecto busca consolidarse en la parte electrónica a través de computadoras especificas que logren integrar y controlar el sistema ABS por la parte de microcontroladores. ”El análisis y modelado se enfocan a una superficie de contacto entre la llanta y el piso durante el proceso de frenado, se plantea un modelo y se realizan simulaciones de éste”.
Sin embargo, aclaró, el plan aún se encuentra en la fase de diseño y la propuesta es llegar a la implementación del dispositivo, pero para ello, falta diseñar un prototipo y hacer un estudio en tiempo real.
Por su parte, Juan Manuel Velázquez, jefe del mismo departamento, indicó que el uso del frenado ABS en las ciudades es menor que en carretera, aunque en cuestiones de seguridad es mejor tenerlo y no usarlo como sucede con las bolsas de aire.
“Esta es sólo una hipótesis desde el concepto académico. De ser aplicado, la firma automotriz tiene que evaluar desde la manufactura hasta la comercialización, incluso podemos decir que el costo, respecto al ABS tradicional, se vería disminuido en un 50 por ciento, cifra que puede varias dependiendo el punto de vista de quien arma el vehículo”, enfatizó.
Más economía
Iván Vázquez Álvarez, profesor e investigador del departamento de Electrónica, resaltó que parte de las metas más importantes es crear un sistema de frenos ABS económico con las mismas características de seguridad, ideal para reducir las vibraciones. “El resultado debe ser competitivo en cuanto al costo y calidad”.
Finalmente, dijo que de los retos para la academia es eliminar la barrera existente con el sector industrial, gracias al apoyo de Conacyt, organismo que trata de abrir la brecha a través de esfuerzos conjuntos entre ambos actores.
Después de tener la parte teórica, ahora el desafío de los tres académicos es conseguir el apoyo de alguna armadora de autos y tener la posibilidad de obtener un prototipo para realizar las pruebas prácticas.
Pese a esos obstáculos, aseguran que el sistema que proponen será un parteaguas en la industria automotriz nacional, tanto en autos como en autobuses y camiones.
(Con apoyo de Yaneth Rojas y Alicia Mendoza)