Con el fin de fortalecer una cultura de seguridad vial, así como la protección al medio ambiente, el Senado de la República solicitó a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), dar a conocer los criterios para las características de diseño, construcción e instalación de los reductores de velocidad viales.
Considerado de suma importancia, este dictamen fue aprobado por el Pleno del Senado, y espera que se garantice la seguridad vial de los reductores de velocidad, conocidos como “topes”.
En el documento de emisión de criterios, se dio a conocer que algunos reductores de velocidad pueden generar consecuencias ambientales negativas, además de no estar plenamente justificados.
Pese a que estos elementos son muy solicitados en la sociedad, gracias a su efectividad para que los conductores reduzcan su velocidad en zonas especiales, no existen estándares técnicos sobre su diseño, material, medidas, construcción o instalación, lo que provoca la proliferación de los mismos con diferentes características.
De igual forma, la presencia de los “topes” puede generar un impacto ambiental, toda vez que aumentan el gasto energético de los vehículos, aumentando las emisiones de partículas contaminantes a la atmósfera.