Con el objetivo de proteger al máximo a los pasajeros, Volvo Cars presentó una innovación pionera en seguridad automotriz: el cinturón de seguridad multiadaptativo, un desarrollo que marca un nuevo estándar en la protección de los ocupantes en situaciones reales de tráfico.
Este nuevo cinturón es capaz de adaptarse automáticamente a las condiciones del entorno y a las características individuales de cada pasajero. Utiliza datos en tiempo real obtenidos de sensores interiores y exteriores del vehículo para ajustar el nivel de protección. Así, el cinturón puede ofrecer una respuesta personalizada según la estatura, peso, complexión y posición del ocupante.
Por ejemplo, si una persona de mayor tamaño se ve involucrada en una colisión severa, el cinturón aplicará una mayor carga para proteger mejor la cabeza. En cambio, si se trata de una persona más pequeña en un accidente leve, la carga será menor para evitar fracturas en las costillas.
Nos enorgullece anunciar que el innovador cinturón de seguridad multiadaptativo estará disponible en nuestros nuevos modelos, comenzando con el EX60. En Volvo seguimos desarrollando soluciones que responden a necesidades reales”, declaró Raymundo Cavazos, Director General de Volvo Car México.
Protección inteligente
Este sistema incorpora once perfiles distintos de limitación de carga, comparado con los tres que ofrecen los cinturones tradicionales. Esta mayor variedad permite una protección más precisa para cada ocupante y cada tipo de impacto.
Además, esta tecnología está diseñada para mejorar con el tiempo mediante actualizaciones inalámbricas (over-the-air). A medida que Volvo Cars recopila más datos de usuarios reales, el sistema optimiza su respuesta a diferentes escenarios.
De acuerdo a Åsa Haglund, Directora del Centro de Seguridad de Volvo Cars, este nuevo elemento es la evolución del cinturón de tres puntos introducido por la armadora en 1959.
Está innovación forma parte del enfoque integral de Volvo hacia la seguridad, que combina este cinturón con airbags, asistencia al conductor y detección de ocupantes. Todo esto se prueba en su laboratorio de colisiones, que cumple 25 años en México y permite recrear accidentes reales para anticiparse a riesgos más allá de las regulaciones.
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