El Centro de Reciclaje y Desmantelamiento (RDC) de BMW Group ha cumplido 30 años de brindar servicio en el proceso de circularidad en la industria automotriz. Este centro se caracteriza por desarrollar y probar procesos para lograr avances significativos en el reciclaje de piezas y materiales reutilizables.
Cada año, el RDC recicla miles de vehículos, que en su mayoría son de preserie y han sido utilizados para pruebas, por lo tanto, no pueden ser vendidos a clientes finales. En el centro, estos vehículos se desmantelan utilizando un proceso estandarizado que se enfoca en identificar componentes de serie reutilizables y materiales aptos para el reciclaje.
Desde 1994, el RDC ha jugado un papel importante para BMW Group y se espera que siga avanzando en sus desarrollos tecnológicos, entre los que destaca la plataforma IDIS (Sistema Internacional de Información de Desmontaje), misma que permite que el centro publique sus datos y hallazgos.
La plataforma juega un papel mundial importante, ya que alrededor de 3 mil organizaciones de 32 países utilizan la base de datos conjunta para aprender a desmontar componentes reciclables de manera rentable y así recuperar materiales de manera eficiente.
El proceso de transformación
El reciclaje de vehículos en el RDC comienza con la liberación de los sistemas de retención y el bombeo de todos los fluidos. Luego se utiliza un proceso patentado por BMW Group para neutralizar los pirotécnicos en las bolsas de aire y otros elementos. A su vez, se extrae el aceite de los amortiguadores.
En el siguiente paso se presta atención especial al reciclaje de componentes individuales. Los componentes que se mantienen funcionales en perfectas condiciones y con estado de serie no se desechan, sino que pasan a los distribuidores registrados para su reventa.
Durante el desmantelamiento, algunos materiales, como el cobre contenido en los arneses de los cables, se separa utilizando maquinaria especial. Posteriormente, cuando se han retirado el bloque del motor y la transmisión, el vehículo restante se prensa y se tritura en una instalación de reciclaje externa.
El desmantelamiento de metales permite que la chatarra se convierta en la materia prima de mañana. Eso no sólo es importante desde la parte ambiental, sino también desde un aspecto financiero, ya que los metales utilizados en el tren motriz generan ingresos altos. Igualmente, el desmantelamiento separado del convertidor catalítico es económicamente eficiente debido a los valiosos metales preciosos que contiene.
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