Más pequeño por fuera pero más grande por dentro, el 208 resulta muy práctico en el uso cotidiano, en especial en las maniobras urbanas, sin renunciar a ser más confortable. Otra ventaja de su nueva arquitectura es la rebaja de peso de que hace gala el 208, con 110 kilos menos de media en relación a la generación precedente, siempre en beneficio de las emisiones de CO2 y de los consumos, que han alcanzado un extraordinario nivel. La ligereza permite reducir el coste de utilización pero, a su vez, revierte también en la seguridad del coche. Todo kilo eliminado corresponde, a menos energía que desperdiciar en caso de accidente.
Este año, el organismo independiente Euro NCAP ha puesto en marcha una nueva escala de valoración que convierte en más difícil la obtención de las estrellas que otorga.
En este contexto cada vez más duro, el 208 es el primer coche de su segmento en obtener las cinco estrellas equivalentes a la puntuación máxima. Esto garantiza la seguridad para todos los clientes. Desde el primer nivel de acabado, el 208 dispone de un elevado nivel de equipamiento de seguridad, ABS, ESP, seis bolsas de aire, anclajes Isofox traseros, regulador y limitador de velocidad, testigo de cinturones no abrochados en las plazas delanteras, columna de dirección deformable, reposapiés activos, entre otros.
Este resultado en las pruebas Euro NCAP es la confirmación de los elevados niveles de seguridad del 208.
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