| El Carrera GT de Porsche se presentó en México y es el vivo ejemplo de que los autos para competencias automovilísticas están también fabricados para circular en la ciudad. |
El Carrera GT de Porsche se presentó en México y es el vivo ejemplo de que los autos para competencias automovilísticas están también fabricados para circular en la ciudad.
Con un motor de diez cilindros, situado detrás del puesto de conducción, tiene una capacidad de 5.5 litros pero puede llegar hasta los 5.7 litros, de manera que rinde una potencia de 450 kW o 612 CV a 8 mil revoluciones por minuto. El par motor máximo es de 590 nm a 5 mil 750 rpm. La velocidad punta es de 330 kilómetros por hora.
Para transmitir la fuerza del auto se utiliza una caja de cambios manual de seis marchas especial, cuya compacidad y situación transversal en la parte trasera del vehículo permiten obtener un centro de gravedad bajo y un óptimo reparto del peso sobre los ejes, todo complementado con llantas de magnesio forjado, en diseño de cinco radios de 19” adelante y 20” en las traseras.
Este modelo dispone también de discos de freno cerámicos, que ya se estrenaron con el Porsche 911 GT2 en el 2001. En vista del traslado de este equipo al nuevo Carrera GT, el sistema PCCB (Porsche Ceramic Composite Brake) ha sido optimizado y ajustado de forma continua.
Su producción se inició en agosto del año pasado en la planta de Leipzig, por lo que de este modelo sólo se producirán mil 500 unidades, de las cuales ya existen mil solicitudes fijas y tendrá un precio de 490 mil dólares.
En México, ya hay tres pedidos, y se entregarán con seis meses de plazo, desde el momento en que se solicitaron, de esta manera Porsche espera comercializar entre cinco y seis unidades en el mercado mexicano.