Mireya Peralvillo
Ante la contracción del mercado interno, Toyota prefiere mantener un perfil conservador y pronostica ventas por más de 100 mil unidades para este 2019.
“Hay mucho nerviosismo, los clientes posponen su decisión de compra de bienes duraderos” reconoció Guillermo Díaz, director de Operaciones de Toyota México.
Es por eso que la armadora de origen japonés apuesta a resaltar el valor del vehículo y así atraer a los clientes, “son productos que tienen un buen valor de reventa y eso puede darle un poco de confianza al consumidor”, explicó en entrevista con Alianza Automotriz.
En la presentación de resultados, el directivo reconoció que ajustaron las expectativas, pues su política consiste en no sobre inventariar los pisos de venta.
Con respecto al crecimiento en el mercado de las SUV, comentó que con Highlander, C-HR y RAV 4 tienen cubierto este segmento pero no descarta traer más versiones de estos modelos a México.
Por otra parte, Eduardo Guzmán, director comercial de Toyota Financial Services, explicó que en 2018 uno de cada dos vehículos que comercializaron fue a través de la financiera y el reto para este año es mantener la misma tendencia.
Recordó que además de comercializar vehículos nuevos también tiene venta de autos usados, mismo que representaron casi el 8% de las ventas.
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