Desde hace unos años, Michelin trabaja en el concepto VISION, que comprende una llanta sin aire, de origen biológico, conectado y con una banda de rodamiento renovable.
Este modelo de desarrollo sostenible de Michelin transformará las llantas de aquí a 2050.
VISION esta integrado por cuatro características clave:
- Sin Aire: una tecnología que elimina el riesgo de pinchazos y pérdida rápida de presión y reduce el impacto ambiental, con una estructura capaz de soportar el vehículo.
La tecnología sin aire está incorporada en el prototipo del sistema de llantas a prueba de ponchaduras (UPTIS) de Michelin, que es un conjunto combinado de neumáticos y ruedas sin aire para automóviles de pasajeros. Combinando una rueda de aluminio y una estructura de carga flexible hecha de plástico reforzado con fibra de vidrio (GFRP).
- Recargable: una banda de rodamiento que se puede imprimir en 3D ,permite depositar la cantidad justa de compuesto de hule, lo que reduce el uso de materias primas.
Michelin innova en la impresión 3D de caucho para ofrecer soluciones de recarga para las bandas de rodamiento de las llantas.
- Conectado: Con la aplicación móvil Michelin, los conductores podrán cambiar las características de la banda de rodamiento según sus necesidades.
MICHELIN TrackConnect, Proporciona información y consejos sobre la presión y la temperatura de las llantas, antes, durante y después de cada sesión.
- 100% Sostenible: Fabricado a partir de materiales reciclados y de origen biológico, VISION aprovecha la experiencia en materiales de alta tecnología de Michelin y sus socios para lograr el objetivo de materiales 100% sostenibles para 2050.
Para lograr esto, la empresa aprovecha su avanzada experiencia en el diseño y prueba de materiales de alta tecnología, apalancados de su propia incubadora, así como de sus socios que cuentan con soluciones innovadoras que buscan cada día mejorar diseños.
Un ejemplo es el trabajo que el equipo de innovación está preparando para producir butadieno a partir de biomasa (residuos de madera, cáscara de arroz, rastrojo de maíz, etc.) cuyo objetivo es reemplazar el butadieno derivado del petróleo, regenerar plástico (PET), reciclar poliestireno o recuperar negro de humo de llantas usadas.