El pasado 26 de septiembre de este año fue publicada en el Diario Oficial de Federación la ampliación del Decreto que fomenta la regularización de vehículos usados de procedencia extranjera con un nuevo plazo que llegará hasta el 30 de septiembre de 2026.
El decreto inicial, publicado el 19 de enero de 2022, ha ayudado a regularizar dos millones 559 mil 256 vehículos. Sin embargo, con esta extensión, se ralentizará la detección de vehículos extranjeros irregulares que ponen en riesgo al sector automotriz y a la población.
En este decreto se indica que no pueden regularizarse los vehículos que por sus características o aspectos técnicos tengan restringidas o prohibidas su circulación en el país de procedencia o en México. Adicionalmente, quedan fuera de la autorización para regularizar los vehículos de lujo o deportivos.
El documento también explica que tampoco serán regularizadas las unidades que no cumplan con las condiciones físico-mecánicas o de protección al medio ambiente. También restringe la regularización de los vehículos con reporte de robo o aquellos relacionados con la comisión de un delito en alguna carpeta de investigación o proceso penal. Todo lo anterior con el fin de salvaguardar a la industria a los ciudadanos.
Frente a este panorama y pese a que el decreto buscaba remediar la entrada de vehículos basura al país, la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores A.C. (AMDA) había advertido que esta acción podría desencadenar, por el contrario, en un estímulo al contrabando.
Hecho que ha sido confirmado con el constante flujo de vehículos extranjeros usados a estados fronterizos del país. En este sentido, mientras que el mercado de vehículos nuevos a nivel nacional avanzó en el mes de agosto un 12.2% respecto a 2023, en entidades con alto dinamismo económico como Chihuahua existe un retroceso de 5.6%. Situación bastante similar a la que ocurre en Baja California, donde sólo existe un mínimo de avance del 2.1%.
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