- En su XXIV edición, el Concurso Internacional de Elegancia 2010, realizado en Huixquilucan, estado de México, reunió a 502 participantes y cerca de 22 mil asistentes atraídos por el segmento de vehículos clásicos, además de conocer las nuevas propuestas de la industria automotriz por parte de Ford, General Motors, Mitsubishi, Renault y Mazda.
- Durante el evento, algunos asistentes compartieron con Alianza Automotriz sus principales inquietudes y dificultades para mantener en circulación sus vehículos, considerados como un lujo de alto valor.
Para los propietarios de automóviles clásicos la restauración de su unidad va más allá de procurarle un buen servicio preventivo.
En la mayoría de los casos, la preservación de este tipo de unidades es cada vez más complicada en la medida que no existe el número de talleres capacitados para prestar un adecuado servicio; situación que se complica con la falta de refacciones que en su mayoría tienen que importarse, incrementando así el precio para cada uno de los servicios de reparación.
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Roberto Cortés
Estado de México
Mini Cooper 1972
“Al ser un modelo que sólo se comercializó en Inglaterra, todas las piezas para su reparación son de importación, en ocasiones éstas pueden tardar dos a tres semanas en llegar, lo cual hace más lenta la entrega de la unidad.
Únicamente en la restauración es donde un propietario tiene que invertir más. En este caso, el gasto fue de 100 mil pesos aproximadamente; pero incluyó: pintura, refacciones, tapicería, etc. Después de esto sólo es el mantenimiento preventivo que se le da a un vehículo normal. Debido a que lo uso únicamente los fines de semana, es un auto muy económico.
Al no existir muchos talleres capaces de atender este tipo de automóviles, los pocos que hay son muy caros. Por ejemplo, un servicio de afinación varía entre los cinco y seis mil pesos, más el gasto de refacciones”.
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Miguel Ángel Sevilla
Estado de México
Chevy Nova 1974
“Al ser un auto de colección y de poco uso, se me facilita la inversión en gastos de mantenimiento.
Por fortuna, no he tenido que frecuentar un taller especializado, llevo mi coche con mecánicos de confianza para la parte de suspensión o carburación. En algunas ocasiones, el mantenimiento es más barato en contraste con otros modelos más recientes.
Es un automóvil con el cual no he tenido mayor problema. Desde su adquisición hace más de tres años, únicamente he tenido que invertirle un promedio de 15 mil pesos y las refacciones son muy fáciles de encontrar”.
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