En Spartanburg, Carolina del Sur, Estados Unidos; se ha desarrollado el Green-Team, cuya meta es reciclar cualquier sobrante de los procesos de producción desde 2012. Para ellos, cada caja vacía de residuos no reciclables es un caso de éxito.
En todo el mundo, BMW Group ha adoptado medidas para alcanzar las meta de reciclar 100 por ciento de los residuos, además de evitarlos:
Todos los desechos metálicos de las prensas son devueltos a lo productores de acero, para que puedan fundirlo para hacer nuevo metal.
Cada vez se utiliza menos cera y película plástica para proteger las superficies de los nuevos vehículos para su entrega, debido a la utilización de vagones de carga cerrados para el transporte ferroviario.
En la planta de Leipzig, pequeñas piezas metálicas se filtran de las bolsas aspiradoras, para que puedan ser utilizadas más tarde.
El mismo enfoque se aplica támbien a la conservación del agua. En la planta de motores en Steyr, en Austria, se alcanzó el objetivo de generar cero litros de agua residuales durante el proceso. Un ciclo cerrado de agua y sistemas de filtros complejos garantizan que ni una sola gota se desperdicie.
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