El valor del mercado

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La industria de autopartes
México es uno de los países en los que el cambio de su parque vehicular es muy notorio, debido, entre otras razones, a los diferentes tratados comerciales y a las inversiones de las firmas automotrices en sus plantas establecidas en nuestro territorio. Lo que ha dejado como huella la diversificación del parque vehicular, así como de sus componentes.

Como integrante del Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN), la producción nacional de autos representa 10 por ciento de la región, y se incluyen cifras de autos “fronterizos”, éstos significan 6.5 por ciento del parque vehicular en la zona. La exportación de autos representa 75 por ciento de la fabricación total, la venta doméstica apenas supera el millón de unidades, sin mostrar un avance cuantitativo.

Dicha situación impacta en el mercado de autopartes, el cual se surte con 42 por ciento de importaciones, de igual forma el crecimiento de la exportación directa de componentes mexicanos ha aumentado. A ello se le une la presencia de un mayor número de marcas y modelos.

En este escenario, los analistas se preguntan: ¿Quiénes están listos para surtir las autopartes de este nuevo parque vehicular? ¿Cuánto cuesta no conocer la información de los vehículos importados usados en el país? ¿Cuánto dinero y empleo cuestan las prácticas desleales de importación?

Segmentación de mercado

De este modo, el mercado de componentes automotrices en México se estima en 30 millones de dólares, 42 por ciento de esta cifra es de importación, el resto es de fabricación nacional. De las importaciones 80 por ciento es para Equipo Original (EO) y el resto para el mercado de repuesto. En cuanto a la producción nacional, 85 por ciento es para EO y el resto para el de repuesto.

El mercado nacional de repuesto tiene un valor de 5.5 billones de dólares e incluye llantas, filtros y todo lo relacionado con el Aftermarket. Representa 18 por ciento del mercado total de autopartes, al finalizar el 2004 podría ser 20 por ciento si continúa con el mismo ritmo que mostró durante el primer semestre del año.

Pero no es la importación ilegal o legal la que inquieta al sector, pues este es un reflejo de la apertura del mercado que obliga a los fabricantes nacionales a mejorar competitividad, desarrollo, líneas completas de producto y precios. La alianza empresa-asociaciones gremiales-gobierno, es necesaria para tratar de anular el robo, triangulación, dumping o contrabando técnico; pues se debe trabajar en equipo para proteger al mercado interno.

Rol del fabricante

Por lo pronto, los fabricantes de autopartes necesitan un enfoque integral de mercado. Antes vendían todo lo fabricado, imponían condiciones y distribuían su mercancía a quienes consideraban mejor cliente. Esto se está acabando, y en los últimos tres o cuatro años se está agudizando.

Más información en Alianza Editores 309 diciembre de 2004

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