A través de un comunicado, Toyota anunció que dejará de producir vehículos en su planta de San Petersburgo, Rusia.
La armadora japonesa señaló que desde el pasado 4 de marzo suspendió las operaciones de fabricación en dicha planta. Lo anterior, a consecuencia de la interrupción del suministro de materiales y piezas clave.
“Desde entonces, hemos estado monitoreando de cerca la situación y evaluando la sustentabilidad futura de nuestro negocio en Rusia”, explicó en el documento.
Asimismo, Toyota señaló que debido al contexto por el que atraviesa Rusia, desde el mes de marzo también han retenido por completo su fuerza laboral.
“Nos hemos asegurado de que nuestras instalaciones estuvieran listas para reiniciar la producción si las circunstancias lo permitían. Sin embargo, después de seis meses, no hemos podido reanudar las actividades normales y no vemos indicios de que podamos reiniciar en el futuro”, indicó a través de su comunicado.
Toyota subrayó que la decisión de dejar de producir vehículos en su planta de Rusia no fue fácil.
“Durante los últimos 80 años, hemos desarrollado nuestro negocio y nuestra marca con el apoyo de partes interesadas de todo el mundo. Ahora debemos actuar de una manera que nos permita proteger los valores y principios que construyeron nuestros predecesores y estar seguros de que podemos transmitirlos a la próxima generación”, expresó.
La empresa japonesa agregó que reestructurará y optimizará sus operaciones en Moscú. El objetivo es mantener una organización eficaz para apoyar la red minorista en la prestación de servicio a los clientes de Toyota y Lexus en Rusia.
“Nos gustaría agradecer a nuestros empleados por su arduo trabajo y lealtad. En reconocimiento a su valiosa contribución, les ofreceremos asistencia para el reempleo, la recapacitación y el bienestar, incluido el apoyo financiero por encima de los requisitos legales”, concluyó.