Ante la incertidumbre por la inestabilidad en el precio del dólar y el encarecimiento de la gasolina, Eduardo Solís, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) hizo un llamado para evitar caer en especulaciones que afecten a la industria automotriz y la economía de los compradores.
Durante el reporte mensual de cifras de producción y exportación, el dirigente dio a conocer que el factor decisivo en el proceso de compra de un automóvil nuevo es el precio total del vehículo, por lo que un incremento en el precio del combustible ocasionaría que la decisión caiga en modelos que ofrezcan ahorro de gasolina, sin desincentivar la compra.
Ante la retirada de la inversión de FORD para construir una planta en San Luis Potosí, Solís declaró que las repercusiones y motivos deberán ser aclarados por la misma empresa, al igual que los casos de posibles amenazas del presidente electo de los Estados Unidos a otras armadoras como Toyota.
Por el momento, el dirigente pidió conservar la calma hasta el 20 de enero, día del nombramiento oficial de Donald Trump como presidente, y recordó que entre México y Canadá se compra la mayoría de los autos producidos en Estados Unidos, además de que este país es uno de los principales destinos de importación mexicana de vehículos.
De igual forma, también informó que la industria automotriz en nuestro país exporta a más de 100 mercados en el mundo, siendo el sector de comercio más valioso del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Finalmente, Solís informó que la presencia de armadoras de todo el mundo en México no se debe a la abundancia de mano de obra barata, sino a factores que favorecen a dichas industrias y al país, tales como la ubicación, la cadena de suministro, personal con experiencia y la existencia de tratados de negocio internacionales.