¡Hola amigos! Todos los automóviles tienen su marca a la vista, de tal manera que los que ven nuestro vehículo saben cual fue nuestra preferida; pero ¿qué pasa en las autopartes de nuestro auto?, casi nunca las conocemos a menos que llevemos nuestro vehículo a reparar al taller, y muchas veces ni así. Por eso, en esta ocasión hablaremos de LuK, y de Walter Baumstark, presidente del Grupo LuK México.
Luk llega a México aproximadamente hace 30 años con la misión de surtir embragues y discos para el Sedan de Volkswagen, el otrora “Vochito”. En aquellos años construyeron una pequeña planta, trajeron maquinaría, herramentales y comenzaron a producir para Volkswagen de México.
Exitosa trayectoria
Cuando llegó LuK a nuestro país vino acompañado del señor Walter Baumstark, enviado desde LuK Alemania, quien comenzó trabajando en el área de maquinados, luego en producción, taller mecánico, aseguramiento de calidad y desarrrrollo técnico asi como en ingeniería. De esta forma llegó a conocer perfectamente todos los requerimientos de los clientes de equipo original y después de 17 años se incorporó al área de mercado de repuesto o también llamado aftermarket.
Después de esta exitosa trayectoria, y desde hace unos meses, regresa a la parte de equipo original pero ahora como presidente del Grupo LuK México.
Una de sus grandes satisfacciones fue que luego de ser únicamente proveedores de Volkswagen Mexico, en tan sólo siete años se conviertió en el proveedor número uno de clutches de equipo original de las marcas de los años 80.
El señor Baumstark tiene una personalidad fuerte, pero al mismo tiempo amable; su plática es amena e interesante debido a la gran experiencia que lleva en la industria de autopartes. Tiene perfectamente definidos sus objetivos empresariales, por ejemplo: consolidar lo que han logrado en los últimos años; crecer en diferentes áreas como la ampliación y robotización de su almacén, ubicado en la Ciudad de México, así como la incorporación al mercado mexicano del nuevo Clutch Hevy Duty y la presentación del nuevo embrague Doopla para la automatización de las cajas manuales. Este concepto tendrá su implementación en los modelos 2008 que se fabricarán en Estados Unidos y que seguramente los tendremos en México.
Mejorar cada día
Baumstark es un hombre agradecido con Dios por tener un trabajo que disfruta al máximo, así como por la competencia ya que ésta lo hace mejorar cada día.
Reconoce que los empresarios chinos han mejorado mucho en los últimos años en cuanto a calidad y productividad, por esta razón LuK tiene una fábrica en China.
“China no es un país para tener miedo, sino respeto, ya que es un mercado grande”, afirma Walter Baumstark y agrega: por ello es necesario mantener una comunicación estrecha con los clientes, saber más de sus necesidades para que cuando lleguen los competidores extranjeros a nuestro país tengamos un mercado cautivo y satisfecho con lo que se hace en México.
La clave del éxito de LuK México, al tener un 50 por ciento de participación de mercado de equipo original y casi lo mismo en aftermarket, es su gente; sus 360 empleados que durante todos estos años se han distinguido por ser mejores que los de la competencia.
Por ello espera tener este año un crecimiento como grupo entre un 14 y 15 por ciento.
Otro punto clave para LuK es la capacitación, un tema que escribe con letras mayúsculas, porque es esencial para los clientes, tanto del sector automotriz como del autotransporte.
El señor Baumstark llegó muy joven a la Ciudad de México junto con su esposa, quien lo ha acompañado durante todo esta travesía México-alemana.
Sus hijos mexicanos (ya usan pasaporte, nos dice sonriente Walter) conviven con él durante el tiempo libre que tiene; “la familia es parte fundamental para su vida diaria”, confiesa.
Después de muchos años en nuestro país se considera mexicano ya que nuestra tierra los recibió bien, y hasta la fecha ha logrado consolidar verdaderos amigos en esta gran familia: la industria automotriz.
Uno de sus entretenimientos favoritos es el buceo, aunque no lo práctica con frecuncia debido a la lejanía de las playas. Asimismo, le gusta leer novelas en general, pues “es bueno despejarse de vez en cuando de las tareas laborales”, comenta.
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