Con la propagación de coronavirus entre la población el uso de motos cobró mayor relevancia ya que se convirtió en un medio de movilidad seguro, rápido, económico y accesible, ganando terreno frente al transporte público.
Otro de los sectores que también se vio beneficiado por su uso fue el de comercio electrónico ante la necesidad de distribuir comida rápida, productos farmacéuticos, etcétera.
De acuerdo con un análisis realizado por Mercado Libre, el mayor incremento en la demanda de motocicletas se registró en mayo, junio y julio, la cual superó hasta 30% la solicitud registrada en los meses de 2019.
El estudio demostró que, ante la crisis económica y la pandemia, 80% de los usuarios se inclina por modelos usados, mientras que 20% prefiere motocicletas nuevas, cifra que representa un crecimiento de 8% en contraste con lo obtenido el año anterior.
Con este panorama, el servicio dedicado a la reparación de motos ha tenido su mayor apogeo en lo que va del año y la expectativa es que en los siguientes mantendrá el mismo ritmo de crecimiento.
A decir de Cristóbal Ramos, capacitador de la Confederación Nacional de Talleres de Servicio Automotriz y Similares (CNT), el número de servicios que se realizan en los talleres de motos creció hasta 50% en las ciudades, mientras que en las zonas rurales ascendió 30%.
¿Nuevo modelo de negocio o extensión?
Ramos explicó que, más allá de una migración en el modelo de negocio, los talleres dedicados a la reparación de automóviles están agregando el mantenimiento de motos como un servicio extra, en contraste con los talleres especializados en motos que, han sido los más favorecidos.
De acuerdo con el también ingeniero automotriz, existe una oportunidad de negocio en la reparación de motos en la medida en que la similitud con la inyección electrónica de los autos les permite familiarizarse con los sistemas mecánicos.
“Es muy visible y recomendable para incrementar sus ingresos, ya que las motocicletas están implementando un crecimiento en la movilidad. Adicional, la venta de refacciones para motos también ha tenido crecimientos mensuales de hasta 20%”, agregó Cristóbal Ramos.
En su caso, dijo que, a raíz de la necesidad de llevar capacitación decidió dejar el segmento de autos por el servicio de motocicletas.
Lo primero que debes saber de las motos
Antes de cambiar el anuncio de ‘Servicio automotriz’ a ‘Servicio para motos’ en tu negocio, debes saber que, para reparar una moto básica, la inversión inicial oscila entre 30 y 50 mil pesos, mientras que los servicios de inyección electrónica van de los 50 a 100 mil pesos, ya que se necesitan equipos de diagnóstico especiales para este tipo de unidades.
Adicional, si bien algunos sistemas son similares con los autos, la capacitación siempre será esencial en cualquier especialización.
“Es indispensable la capacitación, ya sea por marcas o general y empezar con el sistema eléctrico y el sistema de motor. Les recomiendo no casarse con una sola marca y que adquieran equipo de diagnóstico para ofrecer un servicio profesional y estar siempre a la vanguardia”, reiteró Cristóbal Ramos, capacitador de la CNT.
Apuntó que las marcas más comunes en reparación son Italika, Honda y Yamaha, “las marcas premium como Harley-Davidson y BMW no llegan al taller, van a la agencia de la marca, porque los talleres independientes aún no están capacitados para dar el servicio”.
Evolución constante
Para Juan Aquino Guzmán, propietario del taller de mantenimiento y reparación de motos Motad, ubicado en Oaxaca, a partir de la pandemia de COVID-19, el trabajo en su negocio se incrementó entre 40 y 50% lo que no había pasado años anteriores.
“Lo más común son los servicios de afinación para motonetas y motos de trabajo. Las marcas más comunes que llegan al taller son Italika (70%) y Honda (30%).
Refirió que, por la experiencia de 10 años es común ver que los técnicos son quienes están migrando a la reparación de este tipo de unidades, ampliando sus posibilidades de trabajo.
“Antes de la pandemia realizábamos entre cinco y 10 afinaciones a la semana, hoy estamos hablando de 15 a 20 servicios, además de los trabajos eléctricos y ajustes de motor, derivado del incremento en la venta de motos, porque con el coronavirus la gente tiene miedo de moverse en transporte público”, aseveró.
Para Juan Aquino, la tendencia es que este comportamiento seguirá creciendo en los siguientes meses, lo cual, también ha impulsado una mayor competencia en la región, reto al que hace frente con servicio al cliente, refacciones de calidad y capacitación constante en las nuevas tecnologías.
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