A pesar de declararse en bancarrota, la empresa de origen japonés, Takata Airbag pagará compensaciones por lesiones personales o muerte a causa del mal funcionamiento de sus bolsas de aire.
En un comunicado de prensa, Eric D. Green, máster especial nominado por el Departamento de Justicia para el Fondo de Restitución Individual Takata Airbag y fideicomisario del Fondo Fiduciario de Compensación Tort, informó sobre la creación de un programa de compensación para quienes hayan sufrido o puedan llegar a sufrir lesiones personales o muerte por negligencia provocadas por la ruptura o el despliegue agresivo de un inflador de airbags de nitrato de amonio de fase estabilizada de Takata.
Los afectados pueden acceder al Fondo de Restitución Individual (“IRF”, por sus siglas en inglés) de 125 millones de dólares del Departamento de Justicia y/o del Fondo Fiduciario de Compensación de Perjuicios Provocados por Airbags Takata (“TATCTF”, por sus siglas en inglés) de aproximadamente 140 millones de dólares.
Los fondos cubren únicamente lesiones físicas y muerte por negligencia como resultado de un defecto del inflador de airbags Takata. Los reclamos relacionados con lesiones o muerte por negligencia provocadas por otros componentes del airbag –tales como una falla en el despliegue del airbag, el despliegue espontáneo del airbag, lesiones por colisión no relacionadas con el inflador, o pérdidas económicas no relacionadas con las lesiones físicas o la muerte- no están cubiertos los fondos.
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