La Industria Nacional de Autopartes (INA) se pronunció ante el repentino (y sorpresivo) anunció de Donald Trump de comenzar con la imposición del 25% de aranceles de forma inmediata. En este sentido, Gabriel Padilla, Director General de la INA, calificó a los aranceles como un “golpe irracional y severo que afecta la competitividad económica de la región”.
En este sentido, el organismo presentó el contexto actual del sector de autopartes, donde señalaron que existen más de 2 mil empresas dedicadas a dicho segmento. Asimismo, resaltaron que se generan más de 800 mil empleos. Por si fuera poco, gracias al T-MEC, la Inversión Extranjera Directa (IED) fue de 2,300 millones de dólares en el último trimestre de 2024.
Cabe destacar que el 80% de las exportaciones del sector van para Estados Unidos, sumado a que el 74% de los insumos directos e indirectos utilizados en las autopartes provienen de dicho país. Padilla añadió que los gravámenes trasladan todo el costo de producción al cliente final; es decir, a los estadounidenses.
Defensa inteligente
Aunque el panorama pone en aprietos al actual gobierno de la Presidenta Claudia Sheinbaum, la INA señala que conviene agotar todas las instancias de diálogo “antes de cualquier otro plan B, C o D”. En este contexto, señalaron que se encuentran en diálogos con organismos homólogos en EU para medir cuál será el impacto en la pérdida de empleos y elevación de costos.
No obstante, Gabriel Padilla también mencionó que México debe actuar de manera inteligente. Actualmente el T-MEC cuenta con instrumentos legales donde se demuestra que es violatorio la imposición de aranceles. En pocas palabras, se atenta contra los principios de libre comercio.
Nadie busca una guerra comercial con EU, lo que queremos es fortalecer la integración de los tres países (México, EU y Canadá). En el T-MEC tenemos las reglas del juego, así que valdría la pena entrar a la revisión expedita y no esperar al 2026”.
El directivo agregó que la aplicación de aranceles espejos no beneficia en nada a la industria mexicana, por lo que eso no sería una medida viable y recomendable. La INA también comentó que México es una nación resiliente, por lo que los proveedores locales pueden aprovechar el panorama para crecer.
México no va a dejar de producir autopartes y automóviles. En donde nos digan, pondremos nuestra producción. Lo que es inviable son estos costos en una región que ha crecido demasiado en conjunto”.
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