Disminución en los índices de ventas, paros laborales y restricción de créditos, principalmente, frenaron el desarrollo del sector durante el 2008.
| A pesar de que predomina un serio interés de rescatar y fomentar el mercado mediante apoyos financieros, la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y la de Distribuidores de Automotores (AMDA), advirtieron que aún no hay una medida que lo garantice.
Ante este panorama, manifestaron Eduardo Solís y José Gómez Báez, presidentes de la AMIA y la AMDA, respectivamente, crece la incertidumbre por el rumbo del sector, el cual, tal como se esperaba, cerró el 2008 en sus ventas internas con un descenso del 6.8 por ciento en comparación del año anterior.
Así, en el periodo referido, según los organismos, sólo se colocaron un millón 25 mil 520 vehículos, equivalente a 74 mil 346 unidades menos que en 2007. De continuar con esa tendencia, aseguró Eduardo Solís, hacia el término de 2009 la producción nacional de automotores podría bajar hasta un 20 por ciento, segmento que en el periodo enero-diciembre de 2008 creció cuatro por ciento; en tanto que las exportaciones registraron un incremento de tres por ciento.
Se estima que en el país, siete de cada 10 automóviles se comercializan por esta línea, y 80 por ciento de éstos es mediante financiamiento bancario. Otro de los obstáculos que enfrenta la industria es el Decreto automotriz para la importación definitiva de unidades usadas que entró en vigor a inicios del año, el cual, a decir de los directivos, no define bien los términos bajo los que deberán acreditarse el origen de los vehículos y gocen de la exención arancelaria. “Los distribuidores de vehículos cuestionan la ineficiencia gubernamental en la celebración de acuerdos para el intercambio de información entre los países que conforman el Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN), a fin de que se restrinja el comercio de unidades contaminantes, inseguras o participantes en hechos delictivos”, manifestó José Gómez Báez.
Panorama 2009 De acuerdo con Eduardo Solís, de la AMIA, las dificultades y repercusiones financieras de 2008 apuntan a tener perspectivas negativas para este 2009 en la industria automotriz mundial, la cual repercutirá en el sector mexicano en materia de producción y exportación.
Mencionó que México deberá tener una sólida estrategia de promoción de su mercado y de búsqueda de nuevos nichos de exportación. Asimismo, dijo, es necesario estimular la demanda nacional mediante la renovación de nuestro parque vehicular, tema que estará en el centro de discusión en los próximos meses. |
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