La emergencia por coronavirus (COVID-19) tiene detenida la producción de automóviles y autopartes en México, ya que no ha sido considerada como esencial por las autoridades.
El eventual impacto económico tiene al sector “con el pie en el acelerador”, esperando sólo el visto bueno de las autoridades para reiniciar.
La presión de Estados Unidos
A pesar de la situación del país vecino del norte tiene más casos de coronavirus que México, el presidente de EU, Donald Trump, quiere que cuanto antes se regularicen las cosas, y ya está en pláticas su equipo con la Secretaría de Hacienda de México.
El primer sector a activar, según un comunicado del mismo Gobierno de la República con fecha del pasado viernes, indica que esperan que sea el sector automotriz, y que éste sirva sirva como modelo para reanudar otras industrias importantes.
El mismo presidente de México, López Obrador, ya dijo que las pláticas siguen ; sin embargo, no avalará nada en caso de no llevarse a cabo todos los protocolos. Del mismo modo, está seguro de que no pueden empezar Canadá y Estados Unidos sin México, debido a la cantidad de piezas que exporta.
Puebla y Tlaxcala
Algunas fuentes periodísticas indicaron a lo largo de estos días que Puebla y Tlaxcala abrirían sus plantas entre el 1 y el 4 de mayo; sin embargo, en el caso de Volkswagen y Audi, las armadoras emitieron información donde afianza que regresarían el 18 o el 31 de mayo, según las autoridades lo dispongan.
Comunicados de los sindicatos de los trabajadores de las marcas establecidas en Puebla con fechas del 28 de abril (Audi) y 29 de abril (Volkswagen) aceptan mantenerse atenidos a las disposiciones de las autoridades, y permanecen a la espera de un veredicto de apertura antes de lo indicado.
Cabe señalar que en Estados Unidos, Volkswagen pretende reanudar su actividad durante los primeros días de mayo, así como otras firmas cuyos sindicatos se encuentran en negociaciones para evitar reducciones de salario, despidos y garantizar medidas de sanidad.
Toyota
La armadora japonesa anunció que su reactivación comenzaría hacia el 11 de mayo en América del Norte, sin embargo, en México no podría ser antes del 18 de mayo -al no considerarse aún esencial-, dependiendo de la situación por la que atraviese la localidad de sus instalaciones, como se decretó al declararse la fase tres.
GM, Ford y FCA
Las tres firmas esperaban comenzar el 4 de mayo en los Estados Unidos, sin embargo, The Wall Street Journal reveló que las armadoras tendrían que aguardar hasta el 18 de mayo. Esto después de que se encontraban en pláticas con el sindicato de trabajadores. En México, las armadoras esperan el intervalo entre el 18 y 31 de mayo.
Lo anterior podría aligerar un poco la presión de las armadoras en México para reabrir, y llevar a mejor puerta las negociaciones con Estados Unidos y Canadá, gracias a la nueva flexibilidad de fechas.
Entidades se preparan
Los Clúster tanto de San Luis Potosí, como el de Guanajuato, han comenzado pláticas para llegar a acuerdos bajo los que los trabajadores puedan regresar a sus actividades en cuanto las autoridades lo indiquen, y que esto sea bajo protocolos de salud adecuados.
De acuerdo con el director del Clúster Automotriz de Nuevo León, Manuel Montoya, trabajan en nueve ejes para procurar las condiciones sanitarias y de higiene de los trabajadores para que las autoridades del país permitan su reapertura o reclasifiquen el sector como una industria esencial.
Las reservas
Las fechas aproximadas, desde luego, se mantienen a expensas de un decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación. Ése tan ansiado por el sector automotriz para frenar el golpe económico que sufren desde el primer día de orden de cierre.